Fray Olavo Seifert cumplió 101 años, 79 como fraile franciscano y 74 como sacerdote. Desde su ordenación vio pasar siete Papas en la Silla de Pedro, pero eso es un detalle: “tenía cien años el año pasado y el Señor me dio otro año de vida y bendiciones. Quiero agradecer al Señor, especialmente por la lucidez que me ha consagrado en todos estos años”, dijo Fray Olavo.
Y celebró sus 101 años con Cristo en una Santa Misa.
Nació en Curitiba el 4 de agosto de 1919 como Ervino René Seifert, hijo del relojero Gustavo y Maria. Cuando se incorporó a la Orden de los Frailes Menores, se le llamó Fray Olavo.
Un encuentro con Dios desde muy pequeño
Con solo tres años y medio, Ervino asistió al jardín de infancia de la Escola de Santo Alberto, dirigido por hermanas. Fue durante este período que el padre comenzó a reparar y mantener el reloj de la torre del Monasterio de São Bento, en el centro de São Paulo.
En la Parroquia de los Padres Saletinos de Santana hizo su primera comunión y sirvió durante muchos años como monaguillo en funciones litúrgicas.
Según el fraile franciscano, desde niño ya sabía lo que quería: a los 7 años se animó a decirle a su madre que tenía la intención de estudiar para ser sacerdote.
Una invitación inesperada de San Francisco para ser fraile franciscano
“A los 13 años me llegó la invitación de San Francisco a ser franciscano en forma de prospecto del Seminario Serográfico São Luís de Tolosa en Río Negro (PR)”, reveló Fray Olavo.
“Mi tía oró para que uno [de sus sobrinos] se hiciera sacerdote. No tenía ninguna duda de que este era el lugar donde quería estar, aunque no conocía San Francisco de Asís, salvo el fraile que me bautizó en Curitiba, Fray Pascoal Reuss, santo fraile”, subrayó el fraile franciscano.
Ingresó al seminario y, en 1940, en el Noviciado, cuando recibió el hábito franciscano e hizo la profesión de votos temporales el 22 de diciembre de 1941. Por lo tanto, ¡este año cumplirá 80 años vida franciscana!.
Él mismo dice que se enamoró de este ideal franciscano y, desde que llegó a Río Negro, se sintió un fraile. Destaca el valor de la fraternidad como nuestro sello distintivo de los frailes menores.
Y fue con la experiencia de la humildad franciscana, de hacer bien y fielmente todas las cosas, dejando la centralidad a la vida de oración como Fray Olavo vivió su vida y su misión franciscana
Hoy día vive en la Fraternidad de Acogida de Bragança Paulista, donde residen los frailes más antiguos de la Provincia. “Cuando cumplí 100 años, fue un día lluvioso y muy frío. Ahora, con 101 años, estamos en un año de una pandemia de coronavirus. Agradezco [a Dios] por haber enfrentado estas dificultades”.
Y agregó: Soy el fraile más antiguo de la Provincia y espero ver más frailes centenarios el próximo año: fray Abel, en Rodeio, cumplirá 100 el 19 de julio; y Frei Cássio, en Curitiba. Doy gracias a Nuestro Señor por todo lo que me ha hecho”.
Y su cumpleaños fue el 4 de agosto, ¡el día del Santo Cura de Ars, patrono de los sacerdotes!
Aquí puedes ver más fotos de la celebración de su cumpleaños celebrando Misa.
¡Agradezcamos a Cristo por nuestros sacerdotes y pidamos por las vocaciones religiosas!
Este artículo fue publicado originalmente en franciscanos.org.br.
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