En un artículo de su blog Exorcist Diary, el exorcista Monseñor Stephen Rossetti narra cómo descubrió el poder de la intercesión del beato Michael McGivney, fundador de los Caballeros de Colón, contra los demonios de la masonería.
Exorcista descubre la poderosa intercesión del beato Michael McGivney
Las sesiones de exorcismo fueron intensas, pero Dios bendiga a la joven afligida que resultó ser una verdadera guerrera espiritual. Tenía, sin culpa aparente propia, espíritus malignos generacionales, incluida la masonería de la línea familiar. Estaba decidida a seguir una vocación religiosa y los demonios no tenían nada de eso. La batalla se produjo. Ella sostuvo su extremo con valor.
Se había hecho un gran progreso inicial, aunque las sesiones intensivas afectaron a todos los presentes. En un momento, un sacerdote asistente sacó una reliquia del Padre Michael McGivney, recientemente beatificado fundador de los Caballeros de Colón, y se lo entregó al exorcista. Curiosamente, el P. McGivney originalmente fundó los caritativos Caballeros de Colón en parte como una alternativa católica al atractivo de los masones y cultos secretos .
El exorcista tomó la reliquia y dijo: “¡Por la intercesión del Beato Padre Michael McGivney, ordeno a los demonios que se vayan!” La joven dijo que escuchó a los demonios burlándose de él, “Ese cura rural, ¿¡estás bromeando!?” (Los exorcistas reconocen en el comportamiento burlón de los demonios a menudo el terror subyacente de lo que está por venir).
Entonces el exorcista dijo: “Le pido al Señor que manifieste la santidad de Michael McGivney a través del dolor que soportan los demonios”. Los demonios dejaron escapar un grito espeluznante. Más que durante las oraciones anteriores, estos gritos eran más fuertes y teñidos de desesperación. Estaba claro para todos en la sala que algo importante estaba sucediendo.
Luego se colocó la reliquia en la coronilla de la cabeza de la mujer afligida y los demonios soltaron otro grito espeluznante. Al mismo tiempo, el sacerdote asistente leyó la “Oración por la Canonización del Beato Michael McGivney”. Cada vez que la reliquia tocaba su cuerpo, se retorcía y gritaba.
El Exorcista volvió a ordenar a los demonios que se fueran por intercesión del P. McGivney. Ella se convulsionó y comenzó a toser una espuma blanca y espumosa, típica en un exorcismo, especialmente cuando los demonios comienzan a irse. Entonces cesaron las contorsiones y los gritos. La mujer volvió en sí y estaba en paz. Estaba claro que varios de los demonios acababan de partir.
El exorcismo avanzaba, pero cuando se invocó al P. McGivney, se llevó a un nuevo nivel. Pensándolo bien, no nos sorprendió que el P. McGivney fue tan efectivo contra los demonios de la masonería, ya que había dedicado su vida a una alternativa: los Caballeros de Colón. Además, las reacciones de los demonios confirmaron nuestra propia convicción de la santidad del Beato P. Michael McGivney. Ciertamente invocaremos la intercesión de este santo sacerdote en futuros exorcismos, especialmente cuando se trate de los demonios de la masonería.
¡Beato padre Michael McGivney, ruega por nosotros!
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