Su nombre es Betina Lerman, enfermó de COVID en septiembre y estuvo en coma por cerca de dos meses. Los médicos no podían despertarla y, sin creer que había esperanzas, sus familiares iban a desconectar el ventilador que la mantenía con vida. Pero el mismo día en que iban a quitarle el respirador, Betina de pronto despertó.
Su hijo, Andrew Lerman, contó a CNN que, como su madre no había respondido a los esfuerzos médicos para despertarla, ya habían asumido que el pronóstico era irreversible. Así, habían decidido quitarle el soporte vital y habían comenzado a organizar su funeral.
Sin embargo sucedió algo impensado. El día que iban a quitarle el ventilador a Betina, el médico llamó sorpresivamente a Andrew.
Mujer estuvo en coma 2 meses por COVID y despertó día que iba a ser “desconectada”
“Él dice ‘bueno, necesito que vengas aquí de inmediato’. Yo estaba como, ‘OK, ¿qué pasa?'”, comenta Andrew Lerman. “Él dijo: ‘Bueno, no pasa nada. Tu madre se despertó'”.
La noticia impactó tanto al hijo de Betina que dejó caer el teléfono.
Andrew comentó que su madre, quien cumplirá 70 años en febrero, tenía varios problemas de salud. Es diabética, tuvo un ataque cardíaco y una cirugía de bypass cuádruple.
Betina se contagió de COVID en septiembre, no estaba vacuna pero según su hijo pensaba hacerlo cuando se enfermó. El cuadro de salud se complicó, ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos fue conectada a un respirador y permaneció en coma.
“Tuvimos una reunión familiar con el hospital porque mi madre no se estaba despertando. No importaba lo que hicieran, no podían hacer que se despertara”, dijo Lerman. “Dijeron que sus pulmones estaban completamente destruidos. Hay un daño irreversible, simplemente no va a suceder”.
Pero Dios tenía preparada otra cosa y Betina despertó del coma. Pasaron tres semanas desde ese momento y aún se encuentra en estado grave pero puede puede mover las manos y los brazos y puede respirar por sí sola durante unas horas seguidas con un poco de oxígeno.
Andrew dijo que su madre no sufrió ninguna falla orgánica y no entiendev cómo está tan bien.
“Mi madre es muy religiosa y también lo son muchos de sus amigos, la iglesia y todo lo demás, y todos han estado orando por ella“, dijo. “Así que no pueden explicarlo desde el punto de vista médico. Tal vez sea desde el punto de vista religioso. No soy tan religioso, pero estoy empezando a creer que hay algo que la ayudó. No lo sé”.
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