San Gregorio Magno fue Papa y Doctor de la Iglesia Católica. El nombre “Magno” es adjudicado por el Magisterio a algunos santos cuya vida lo nutrieron profundamente, y son guía esencial para la vida cristiana.

El Papa Inocencio VIII, cuyo papado se dio entre 1484 y 1492, tenía tanta devoción a este santo que concedió indulgencias, tanto parciales como plenarias, a aquellos que rezasen 9 oraciones del santo, escritas en reverencia a la Pasión y muerte de Cristo.

Indulgencias

Según este Papa, quienes rezasen esas oraciones cada día, la Iglesia concedería más de 14 mil años de indulgencia. Si se rezan los viernes el doble, y si se rezan el Viernes Santo se otorga 8 indulgencias plenarias.

Para los que tengan impedimento de leer las oraciones, pueden rezar 20 Padrenuestros y 20 Avemarías frente a la imagen de San Gregorio.

La idea del Papa fue promover la oración por las almas del Purgatorio, para su pronta redención y entrada al cielo. 

Las 9 oraciones de San Gregorio  

Primera Oración

Señor mío Jesucristo, te adoro colgado de la Santa Cruz, coronada de espinas tu Cabeza. Te ruego que Tu Santísima Cruz me libre del ángel malo. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Segunda Oración

Oh Señor mío Jesucristo, te adoro en la Cruz herido y llagado, bebiendo hiel y vinagre. Te ruego que la lanza de Tu Santísimo Costado sea remedio para mi alma. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Tercera Oración

Oh Señor mío Jesucristo, por aquella amargura, que por mí, miserable pecador, sufriste en la Cruz, principalmente en aquella hora, cuando tu Alma santísima salió de tu bendito cuerpo , te ruego Señor, que tengas misericordia de mi alma cuando salga de esta vida mortal; la perdones y la encamines a la Vida Eterna. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Cuarta Oración

Oh Señor mío Jesucristo, yo te adoro depositado en el Santo Sepulcro, ungido con mirra y ungüentos fragantes. Te ruego Señor, que tu muerte sea remedio para mi alma. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Quinta Oración

Oh Señor mío Jesucristo, yo te adoro y considerando aquel tiempo cuando descendiste a los infiernos y de allí sacaste y pusiste en libertad en los cielos a los que allí estaban cautivos, te ruego Señor que tengas misericordia de mí. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Sexta Oración

Oh Señor mío Jesucristo, que estás sentado a la derecha del Padre Eterno, yo te adoro por tu santa resurrección de entre los muertos y Ascensión a los Cielos. Te ruego Señor que yo te pueda seguir y mi alma pueda ser presentada delante de la Santísimas Trinidad. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Séptima Oración

Oh Señor mío Jesucristo, Pastor bueno, conserva y guarda a los justos, justifica y perdona a los pecadores, ten misericordia de todos los fieles y acuérdate de mí, triste y miserable pecador. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Octava Oración

Oh Señor mío Jesucristo, yo te adoro y contemplando que el día del Juicio vendrás a juzgar a los vivos y a los muertos y a los buenos darás gloria y a los malos condenación eterna. Te ruego Señor, por tu Santa Pasión, nos libres de las penas del Infierno, nos perdones y nos lleves a la Vida Eterna. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Novena Oración

Oh amantísimo Padre, yo te ofrezco la inocente muerte de Tu Hijo y el amor tan firme de Su Corazón por toda la culpa y pena que yo miserable pecador merezco, y todos los pecadores: por aquellos enormes y gravísimos pecados míos y por todos mis prójimos y amigos vivos y difuntos. Te ruego tengas misericordia de nosotros. Amén Jesús”.
Un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

¡San Gregorio Magno, ruega por nosotros!

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