Muchos han intentado negar la existencia de Dios basados en la imposibilidad de una de sus principales características: Su omnipotencia.
[Ver: Esta es la principal evidencia de la resurrección de Jesús]
[Ver: ¿La Biblia prohíbe llamar “padre” al sacerdote?]
Uno de los argumentos ateos más populares en Internet en contra de la omnipotencia de Dios, y en consecuencia contra su misma existencia, es el siguiente:
¿Puede Dios crear una piedra tan pesada que ni Él mismo pueda levantarla? Si no puede crear esa piedra, entonces no es omnipotente; si puede crear esa piedra, entonces tampoco es omnipotente porque habría algo que Él no podría levantar. Conclusión: Dios no puede ser omnipotente, por lo tanto no existe.
En un principio puede parecer razonable, pero solo si se tiene un modo de razonar sumamente pobre.
El principal error de ese razonamiento está en su manera de entender la omnipotencia. La omnipotencia no se define como la capacidad de hacer absurdos lógicos. Así, por ejemplo, sería tonto pedirle a Dios que cree un triángulo de 4 ángulos o un soltero casado, pues son conceptos que se autocontradicen. Del mismo modo, la idea de una piedra inamovible que a la vez pueda ser levantada es un absurdo en sí mismo y destruye su propio argumento.
Sin embargo, y solo para hacer las cosas más divertidas, imaginemos el siguiente diálogo:
– Entonces Dios no es omnipotente. Un ser omnipotente también debería tener el poder de hacer absurdos lógicos.
– Bueno, entonces Dios sí puede crear una piedra tan pesada que ni Él mismo pueda levantarla.
– Si no puede levantarla, entonces no es omnipotente.
– No, porque Dios tiene el poder de levantar esa piedra.
– Pero eso es un absurdo lógico.
– ¡Exacto! Afortunadamente ya dijiste que un ser omnipotente también tiene el poder de hacer absurdos lógicos.
[Ver: Esta es la principal evidencia de la resurrección de Jesús]
[Ver: ¿La Biblia prohíbe llamar “padre” al sacerdote?]