El pasado sábado 12 de octubre, en Viena, Austria, el corredor Eluid Kipchoge, de Kenia, rompió de nuevo un récord mundial de maratón. 

La primera vez fue en septiembre del año pasado, momento que se inmortalizó por el gesto cristiano de Eluid al momento de terminar la carrera. 

En esta ocasión se convirtió en la primera persona en correr una maratón en menos de dos horas, para ser exactos, corrió una maratón de 42 kilómetros en 1 hora 59 minutos y 40 segundos. 

Eluid compartió este logró en su cuenta de Twitter donde escribió: 

¡Hoy fui a la luna ida y vuelta! Estoy sin palabras ante la enorme cantidad de apoyo que recibí de todo el mundo. Gracias a todos por la oportunidad que me dieron. Asante”.

La página de noticias ACI África pudo contactarse con miembros de su familia y amigos de su pueblo natal, Kapsisiwa, a más de 320 kilómetros de la capital de Kenia, Nairobi,  y se topó con una hermosa noticia: el maratonista es católico devoto. 

La fe de su pueblo y familia

Poco tiempo después de terminar la carrera, Kipchoge hizo lo que se dice que hace después de cada participación: Se arrodilló, inclinó la frente al suelo e hizo la señal de la cruz en acción de gracias”, informó ACI África.

Asimismo, se supo que su fe católica se debió gracias a su familia, especialmente su madre, Janeth Rotich, quien se considera como la defensora moral y espiritual de Eluid. En una entrevista a ACI Áfrcia dijo: “Me levanto a las 3 a.m. todos los días para rezar por Kipchoge. Rezo el rosario”.

Es más, antes de salir de su país para competir en Viena, Kipchoge ofreció una Misa a Nuestra Señora del Rosario, cuya fiesta se celebraba el día que partió Eluid. Le encomendó sus esfuerzos en la carrera donde haría historia.  

Un pueblo agradecido

El maratonista es considerado como un ejemplo a seguir en muchos aspectos. Muchos seguían la carrera desde sus televisores en su pueblo natal. 

Cuando logró la maravillosa hazaña, su familia, incluidos varios sacerdotes, celebraron una Misa en acción de gracias.

Todos vinieron a la Iglesia para agradecerle a Dios. Celebramos Misa para agradecer a Dios. Celebramos como comunidad; estaba la familia, el P. Benjamin Oroiyo, quien también es miembro de la familia, el P. Benedict Rono, y también nos acompañó el vicegobernador del condado de Nandi, miembro del parlamento de la zona, entre otros líderes locales”, dijo el sacerdote Kennedy Kipchumba, primo del corredor.

Comparte