El Padre Longenecker, escritor de libros y de su blog dwightlongenecker.com, narró en una ocasión cómo conoció a su ángel guardián.

Él había subido al Monte Saint-Michel, Francia, y encontró las casas de la comunidad religiosa que vive ahí. Ellos viven en los alojamientos de la antigua abadía. Los sacerdotes de ahí le permitieron dormir en una de sus habitaciones.

Recuerda que el ambiente en la montaña cuando los turistas se han ido es increíble. El silencio y el canto de los pájaros, el horizonte lejano del mar y la sensación de estar separado de la tierra, es simplemente asombroso y abrumador. 

Aparición por la noche de su ángel guardián

“Esa noche en mi habitación sencilla me desperté a las tres de la mañana. Estaba completamente despierto y consciente de una presencia al pie de mi cama. Se me pareció un hombre que tenía unos siete pies de altura. Muy fuerte y tranquilo. Muy poderoso y lleno de paz”, indicó el Padre Longenecker.

“En mi mente pregunté: ‘¿Quién eres?’, este me respondió: ‘Tu ángel guardián. Estoy caminando contigo en este viaje’. Pregunté si podía saber el nombre del ángel y él estuvo de acuerdo, pero nunca se lo diría a nadie más. Luego descansé en esa presencia durante lo que pareció mucho tiempo antes de que finalmente volviera a dormir”

¿Realmente sucedió esto?

El sacerdote comprende que, aquel que dudaría de su testimonio, diría que él vio una ilusión por estrés, o por cansancio, u otro contexto.

“Soy consciente de este punto de vista cínico y no puedo descartarlo. Todo eso puede ser cierto, pero luego recuerdo el comentario de Santa Juana de Arco en su juicio, o tal vez fueron palabras que George Bernard Shaw le puso en la boca en su obra sobre Joan.

De cualquier manera, los jueces en su juicio desestimaron sus visiones como ‘todo en su imaginación’ y ella respondió: ‘Por supuesto, ¿de qué otra manera me hablaría Dios si no fuera por mi imaginación?”, escribió el sacerdote.

La imaginación, para el sacerdote, es nuestro portal a la eternidad. Es el aspecto creativo de nuestra mente lo que más se parece a Dios el Creador porque la imaginación de Dios siempre está trabajando, siempre creando, siempre haciendo conexiones inesperadas y provocando encuentros inesperados.

¿Fue mi encuentro con el ángel guardián todo en mi imaginación?, por supuesto. ¿De qué otra forma estaría mi ángel en contacto conmigo, excepto a través de mi imaginación?     

¿Qué opinas? ¿Crees que su ángel guardián lo visitó? 

Síguenos también en:

Telegram
Instagram
Twitter

[Ver: El asombroso suceso que convirtió a San Gregorio Magno en el “abogado del purgatorio”]

[Ver: ¿Los escándalos en la Iglesia te hacen perder la Fe? Escucha a este sacerdote]

Comparte