Lucas es un joven español que ha pasado su último verano junto a las Misioneras de la Caridad, atendiendo a los más necesitados en Calcuta (India). Fruto de esta gran experiencia espiritual, ha encontrado 3 secretos que nos pueden ayudar en la Adoración Eucarística.
En una publicación en sus redes sociales, Lucas indicó que durante su tiempo en Calcuta pudo discernir sobre sus momentos frente a Jesús Eucaristía.
“¿Realmente somos conscientes de quién tenemos delante? En mi paso por Calcuta pude discernir sobre el tiempo que pasamos con el Señor. Que verdaderamente ese tiempo sea de calidad y provechoso”, señaló.
El joven de 20 años resaltó que el mes y medio de voluntariado con las Misioneras de la Caridad ha sido una experiencia que le ha “cambiado el alma”.
“Sin duda ha sido una experiencia que me ha cambiado el alma y donde he podido reflexionar tendidamente sobre el tiempo que pasamos con Jesús.
Hemos tenido la oportunidad de ir a Misa todos los días, Hora Santa todos los días, de rezar el Rosario con las hermanas e incluso de rezar en la tumba de Madre Teresa todo el tiempo que quisiéramos”.
Las repetidas oportunidades para estar frente a Jesús le ha permitido encontrar estos 3 secretos que nos pueden ayudar a mejorar nuestra Adoración Eucarística:
1. Estar delante de Jesús
El joven aconsejó evitar “sentarse en el último banco por vergüenza o a un lado de la capilla”.
“A mí me ayuda ponerme delante de Jesús. También porque yo tiendo a desconcentrarme con facilidad”.
2. Hacer silencio
“Lo segundo, y cada vez más importante, el silencio. Las hermanas insisten mucho en cuidarlo en todo momento y Dios habla mucho a través del silencio. Por eso es recomendable dejar de lado el móvil o cualquier distracción que pueda impedirte tener una charla con el Señor”.
3. Escuchar
“Parece absurdo, pero si queremos oír a Dios, debemos escuchar. Me impactó mucho ver a otros voluntarios que, sin mala intención, en las Adoraciones estaban escribiendo de espaldas al Santísimo, con los cascos puestos y escribiendo en la libreta, como si estuviesen en una biblioteca.
Entonces claro, ¿cómo vas a estar hablando con alguien si ni siquiera le estás mirando? Y la intención es buena, porque muchas veces nos podemos ayudar de alguna música que nos evoque o escribir, porque hay mucha gente que eso le ayuda. Pero claro, es muy importante aprender a pasar tiempo de calidad con el Señor y eso sería todo”.
Implementemos estos consejos en nuestros momentos junto a Jesús.