Un sacerdote causó gran revuelo este fin de semana por un tuit en el que pide a los padres de familia eliminar la aplicación Snapchat de los móviles de sus hijos.
El P. Dan Beeman, párroco de Holy Trinity en Norfolk, Virginia, publicó este tuit (en inglés) a primera hora del sábado:
“Queridos Padres: Saquen Snapchat de los teléfonos de sus hijos. Ahora. No pidan. Solo háganlo. Dejen que los odien. Eso pasará.
Con amor, un sacerdote que escucha sus pecados”.
Dear Parents: Get Snapchat off of your kids’ phones. Now. Don’t ask. Just do it. Let them hate you. That will pass.
Love, a priest who hears their sins.
— Father Dan Beeman (@inthelineofmel) July 21, 2018
En pocas horas, el tuit recibió miles de interacciones y muchos comentarios tanto de personas agradecidas por el consejo como de detractores.
Ante las críticas de quienes relaciones su tuit al sacramento de la confesión, el Padre Beeman, que trabaja arduamente en pastoral juvenil, explicó que “el secreto de confesión se aplica a un pecado específico o a la identidad de un penitente. Por siglos sacerdotes, papas y santos, han hecho una mención general de patrones de pecado (sin una referencia específica a la confesión) para educar a los fieles”.
Pero, ¿cuál es el problema con Snapchat?
En los últimos años Snapchat se convirtió en la plataforma más popular entre los adolescentes de Estados Unidos -también consiguió muchos seguidores en América Latina- y pese a que Instagram “adoptó” sus features más populares y le hizo perder audiencia, aún conserva a millones de usuarios muy pero muy jóvenes.
Para los adolescentes de hoy, Facebook es la red social que usan sus padres y abuelos, Instagram es más atractiva como plataforma para compartir sus fotos y videos, y Snapchat es más “privada” y aunque usualmente se usa para compartir contenido divertido, se sabe que hay quienes lo usan para compartir contenido íntimo con sus amigos o parejas e incluso caer en bullying.
¿Usas Snapchat? ¿Qué opinas sobre este tema?