Como cada 20 de Mayo, la Iglesia celebra a San Bernardino, sacerdote franciscano predicador del Santísimo Nombre de Jesús por casi toda Europa. A pesar de ciertas dificultades, logró tener gran elocuencia y lograba ser de gran ayuda en la conversión de los hombres.
Aquí te compartimos 3 datos que quizás no conozcas de este santo:
1. “Voy a visitar a una personita de la cual estoy enamorado”
En cierto momento de su vida, San Bernardino se alejaba de su casa sin avisar a su familia a dónde iba. Cuando por curiosidad le preguntaban su destino él respondía: “Voy a visitar a una personita de la cual estoy enamorado”.
Sus tías, para saber si estaba enamorado de alguien, lo siguieron un día. Lo encontraron rezando con mucha devoción en una gruta en el bosque donde había una estatua de la Virgen María.
2. JHS: Jesús, Hombre, Salvador
Predicó casi toda Europa a pie. A pesar de ser varios sus sermones, a nadie les aburrían sus palabras. Por cada pueblo que pasaba, dejaba estandartes con el símbolo “JHS”, que significaba: “Jesús, Hombre, Salvador”.
Invitaba a todos los que podía a tener un especial cariño y devoción al Santísimo Nombre de Jesús. Lograba convencer a las personas para que creasen estandartes con el símbolo “JHS”. Uno sabía que San Bernardino estuvo en un lugar porque se encontraba dicho estandarte por todos lados.
3. Acusado de supersticioso
Unos envidiosos lo acusaron al Papa Martín V de promover la superstición en los pueblos donde evangeliza. Este le prohibió predicar y lo mandó llamar a Roma. En este lugar, San Bernardino hizo 114 sermones durante 80 días y tuvo un enorme éxito.
Cuando el Papa lo tuvo cerca y comprobó que las acusaciones fueron infundadas, lo quiso hacer arzobispo. Ante la negativa del santo, Martín V lo nombró como superior de los franciscanos para que hayan más vocaciones en esta comunidad.