El pasado 20 de marzo se logró encontrar el cuerpo del sacerdote Clement Rapuluchukwu Ugwu en un bosque cerca de su comunidad. Fue secuestrado el día 13 del mismo mes a manos de unos asaltantes quienes lo hirieron de bala en la captura.

El Padre Clement fue párroco de la iglesia de San Marcos del estado de Enugu, Nigeria. Apenas sucedió la fechoría, el Obispo del estado, Monseñor Callistus Onaga, denunció el crimen a la policía.

Lamentablemente, el personal policial nunca pudo dar con los secuestradores y no pudieron salvarlo a tiempo. Monseñor Onaga se encuentra sumamente insatisfecho con el trabajo de la policía:

“Inmediatamente denunciamos el secuestro del padre Ugwu a la policía y desde entonces fui a la comisaría hasta tres veces donde siempre me decían que estaban a punto de capturar a los secuestradores. Dudo que estuvieran haciendo algo porque el cuerpo del padre Ugwu fue encontrado a solo 20 kilómetros de su casa”, indicó el obispo a Agenzia Fides.

El Padre Ugwu fue enterrado al día siguiente de su hallazgo y la Misa fue celebrada por Monseñor Onaga en la iglesia Catedral del Espíritu Santo. Según Vatican News, tanto Monseñor como el Director Diocesano de Comunicaciones de Enugu, Padre Bejamin Achi, pidieron al gobierno que tengan más rigurosidad con la protección de las vidas y las propiedades de su pueblo.  

Fuente: Agenzia Fides

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