Melannie Flores Saavedra estudia psicología en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Es devota al Sagrado Corazón de Jesús y a la Virgen del Carmen.

Sorprendió a las redes al narrar los momentos incómodos por las burlas de las que ha sido blanco tanto por parte de compañeros de clase como por jefes de práctica (asistentes de maestros) por ser católica… en una universidad católica.

En una entrevista publicada por Somos Periodismo, revista web desarrollada por estudiantes y docentes de la misma universidad, Melannie contó su experiencia.

“Si tú eres una alumna católica eres mal vista. Eso me pasó a mí y creo que continúa pasando. Muchas veces se han burlado de mi fe en clase solo porque pensaba diferente. O no me han dejado más dar mi opinión por pensar distinto al resto”, indicó.

En la entrevista recordó dos momentos en los que recibió malos tratos por su fe católica:

Lugar que defiende cosas ilógicas

En una ocasión, se encontraba en una clase práctica. La encargada promovió un debate sobre el aborto y la defensa de la vida. La mayoría de los presentes, incluyendo a la jefa de práctica, estaban a favor del aborto.

Cuando ella se manifestó en contra, la profesora se acercó a su sitio y vio que Melannie tenía una taza con el logo de la capilla de la universidad y dijo en voz alta: “con razón dice esto pues, mírenla a ella que tiene esta taza del CAPU [sigla del Centro de Asesoría Pastoral Universitaria] que es un lugar que defiende cosas ilógicas”.

Este comentario desató las burlas de los demás alumnos. Antes de este comentario ella se burlaba de la CAPU, y de seguro iba a seguir haciéndolo si no fuera por un alumno que interrumpió la burla e indicó que él también estaba en contra del aborto.

En ese momento la profesora cambió de tema. Después de la clase Melannie se acercó y manifestó su descontento; la profesora pidió disculpas por su comportamiento.   

Me callaba cuando yo quería intervenir

En otra ocasión, en otra clase trabajaron un proyecto sobre comunicación y relaciones interpersonales en la universidad. Melannie observó que no se consideraba promover a vida católica dentro de una universidad católica, por lo que propuso difundir la fe de formas ingeniosas.

La profesora la calló una y otra vez.  Ante la insistencia de la alumna, ordenó cambiar el tema de trabajo.

No es la única

Melannie indicó que ella no es la única que ha pasado por estos momentos, sino que hay muchos alumnos que reciben calificaciones más bajas y sufren burlas por ser creyentes. Ella espera que en la universidad haya más diálogo entre las partes, y que se viva realmente un ambiente de tolerancia y respeto.

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