Es común pensar que la vida de los artistas se caracteriza por descontrol y vicios, estereotipos reforzados por los shows de farándula.

Sin embargo, en el mundo hubo, y sigue habiendo, artistas que buscan elevar el alma de las personas para que se encuentren con Dios.

Ellos también necesitan de la ayuda y la interseción de los santos y de la Iglesia, ya que combaten con este mundo artístico del desenfreno.

Si este es tu caso, te presentamos a cinco santos que son nombrados como patronos de distintas artes.

Si perteneces a alguna de estas, ten la libertad de conversar con tu santo(a) patrono(a):

San Lucas, evangelista:

Es considerado como el patrono de los pintores. Teodoro “el Lector”, del S. VI, indicó que la reina Eudoxia envió a Pulqueria, desde Jerusalén, una pintura de la Virgen María hecho por “Lucas”. A este santo se le atribuyen tres pinturas: Hodegetria, Salus Populi Romani y la Madonna de la Guardia.

San Ginés, mártir:

Es considerado patrono de los actores, ya que este fue su oficio en Roma del siglo III. En una ocasión, actuó un bautismo cristiano en frente del emperador Dioclesiano. Al momento de sentir el agua, sintió el poder del Espíritu Santo y se proclamó, en ese preciso instante, como seguidor de Cristo. Por esta razón, fue torturado y decapitado  en el año 286.

Santa Cecilia, mártir:

Considerada desde el siglo XVI como patrona de la música, especialmente de la música litúrgica. Al momento de casarse, tuvo una conexión especial con el órgano, que le hizo cantar a Dios en su interior, pidiéndole que proteja su virginidad. Su esposo, pagano, respetó su castidad y conoció por ella la fe, convirtiéndose al cristianismo. Ambos fueron martirizados en el año 230.   

Santa Verónica:

Ella es considerada la patrona de los fotógrafos, ya que, teniendo Cristo su divino rostro lleno de sangre, Santa Verónica se aproximó con su paño para limpiarlo mientras subía al Calvario. Él lo hizo, quedándose su cara impresa en la tela. Esto se consideró, religiosamente, como la primera fotografía de la historia.   

San Juan Bosco:

A pesar de que murió 7 años antes de la proyección de la primera “película” en la historia, su ingenio influenció en los jóvenes de sus centros cuando se convirtieron en actores de teatro, periodistas y escritores. Estos a su vez, influenciaron en los salesianos que se dedicaron al cine. Es aquí donde ellos encontraron un útil instrumento de evangelización, destacándose en la materia. Por todo esto, él es considerado como el patrono del cine.  

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