No es raro escuchar historias de santos que al momento de orar levitaban, y no solo en gozo, ¡sino literalmente!

Acá te presentamos algunos de ellos:

San Martín de Porres:

Sus habilidades espirituales no se limitaban al hecho de levitar al momento de orar. Aun así, no era raro encontrarlo flotando alrededor de la capilla mientras hablaba con Dios.

San Francisco de Asís:

En una ocasión su discípulo, el fraile León, lo encontró levitando un par de metros sobre el suelo en la cueva donde solía orar.

San Pío de Pietrelcina:

En una ocasión, mientras algunos fieles esperaban en cola para confesarse, vieron al Padre Pío caminar por encima de sus cabezas.

San José de Cupertino:

Quedó registrado que tuvo unas 70 veces levitando mientras oraba con alegría. No es por nada que lo llaman el “Santo Volador”. Sus levitaciones duraban horas.

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