Una escultura que muestra al Papa Francisco con un bebé en sus manos y a continuación lo arroja al piso causó polémica en México.
La obra se compone de tres imágenes. La primera muestra al Santo Padre con un bebé en su brazos, la segunda muestra que lo ha soltado y la tercera lo retrata riéndose mientras el pequeño se encuentra despedazado a sus pies.
Su autor, el chileno Pablo Maire, la llamó “Chao tradición” y pretende ser una crítica a la Iglesia Católica que, según él, perpetúa un modelo “violento y anacrónico”.
Las imágenes forman parte de la colección “Químicas Ácidas”, que se expone desde el 22 de agosto hasta el 19 de septiembre en la galería Aguafuerte, de Ciudad de México.
En declaraciones a ACIPrensa, el P. Hugo Valdemar, exdirector de Comunicación de la Arquidiócesis de México expresó que se trata “una mofa infame que los católicos no podemos tolerar”.
Sacerdote repudia escultura que muestra al Papa arrojando un bebé al piso
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“La Iglesia Católica siempre ha defendido la vida desde la concepción hasta su fin natural”, por lo que “usar la figura del Papa para mostrar un profundo desprecio por la vida de un niño es monstruoso y ofensivo para los católicos”, afirmó el P. Valdemar.
“Es una burla a la inquebrantable defensa que la Iglesia hace de la vida y de la dignidad de la persona. Es una mofa infame que los católicos no podemos tolerar”, agregó.
El sacerdote mexicano reconoció que “lo más normal es protestar y mostrar nuestra indignación”. No obstante, reconoció que “entre más grande sea el escándalo y la indignación, más satisfechos se sienten sus autores, pues logran la atención pública que tanto desean y que no alcanzarían nunca por la insignificancia y mediocridad de sus obras”.
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