¿Alguna vez has asistido a la Misa de Gallo en Navidad?

¿Conoces la historia que hay detrás de esta hermosa tradición?

El padre Edward McNamara, profesor de liturgia en la Universidad Regina Apostolorum, reconoce que, como ocurre con muchas prácticas litúrgicas, el origen de las tres Misas de Navidad, a medianoche, al amanecer y durante el día, no es del todo cierto.

Sin embargo, el supuesto origen de esta tradición resulta muy interesante.

Según indica EWTN, la Navidad, como fiesta litúrgica celebrada el 25 de diciembre, se originó alrededor del año 330.

“Desde Roma, la celebración de la Navidad se fue extendiendo lentamente hacia Oriente y, poco a poco, se incorporó al calendario litúrgico de las principales Iglesias”, explica el padre Edward McNamara.

Con el tiempo, se volvió costumbre que los sacerdotes celebraran tres Misas distintas en Navidad: a medianoche, al amanecer y durante el día.

Fue el papa Sixto III quien desempeñó un papel clave en la configuración de la forma romana de la Misa de Gallo.

Cuenta la historia que, a inicios del siglo V, mandó construir una pequeña capilla en la basílica de Santa María la Mayor. Esta capilla se asemejaba a una gruta, inspirada en la cueva donde nació Cristo en Belén. Para el siglo VII, las reliquias del Santo Pesebre ya se colocaban en esta capilla en Roma.

Así, el papa Sixto III, inspirado por la costumbre de la vigilia de medianoche que se celebraba en Jerusalén, comenzó a celebrar la Misa de Navidad a medianoche en aquella capilla con forma de gruta.

Según la tradición, Cristo nació a medianoche. Esto lo recordamos en la oración de la novena de San Andrés:

Salve y bendita sea la hora y el momento en que el Hijo de Dios nació de la purísima Virgen María, a medianoche, en Belén, en el frío penetrante. En esa hora, te ruego, oh Dios mío, que escuches mi oración y concedas mis deseos por los méritos de Nuestro Salvador Jesucristo y de Su bendita Madre. y nunca dejarás que enfrente solo mis peligros.
Amén.

¡Hay algo verdaderamente especial en la Misa de Gallo, pues subraya el misterio de la luz de Cristo que brilla en medio de la oscuridad!>>

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