¿Sabías que dos de los apodos más comunes en español tienen origen católico? Tal es el caso de "Pepe" y "Paco", diminutivos que tal vez has usado pero no sabías que están ligados a figuras clave de la fe cristiana.
Si en tu familia hay un José o un Francisco, es muy probable que los hayan llamado con cariño “Pepe” o “Paco”. Sin embargo, estos apodos no guardan una relación evidente con la fonética o escritura de los nombres originales, como es el caso de Majo (María José) o Mafer (María Fernanda), lo que lleva a muchos a preguntarse por su origen.
Si tú también has tenido esta duda, la Academia Mexicana de la Lengua tiene la respuesta.
La Academia, que busca el análisis, el estudio y la difusión de la lengua española, señala que estos hipocorísticos, formas diminutivas de designar de manera cariñosa a alguien, vienen de abreviaciones de frases en latín relacionadas con santos muy importantes.
“Paco” tiene su origen en San Francisco de Asís, a quien los franciscanos llamaban Pater Comunitatis (“padre de la comunidad”). Esta frase también se abreviaba en latín como “Pa.Co.”, de donde se formó el apodo que hoy conocemos.
En el caso de “Pepe”, apodo para el nombre José, su origen se remonta a la frase Pater Putativus (“padre putativo”), como se le denominaba a San José, esposo de la Virgen María y padre adoptivo de Jesús.
Esta expresión solía abreviarse con las siglas “P.P.”, de donde surgiría el popular diminutivo “Pepe”.
Otro posible origen del apodo “Pepe”.
Algunas fuentes sugieren que este apodo podría derivar de la forma abreviada del nombre 'Josepe', una antigua variación de José documentada en textos de los siglos XV y XVI. Otra posibilidad es que provenga de 'Giuseppe', que habría derivado en Peppe, Beppe o Geppe.