Tras someterse a una compleja cirugía de hombro, el Padre Pedro Núñez compartió un mensaje de profundo agradecimiento por las oraciones por su salud y reconoció la clara protección de Dios tanto en el accidente como en un procedimiento que terminó siendo más delicado de lo previsto.
El reconocido sacerdote y predicador católico de EWTN sufrió un accidente tras la grabación del programa “A Solas con Jesús”.
Mientras acompañaba a una invitada, tropezó al bajar del auto y, debido a la inclinación de la calle y la oscuridad de la noche, perdió el equilibrio y rodó hasta la orilla de la calle.
La caída provocó una fractura en el húmero izquierdo que, sumada al daño previo por artritis y a los tejidos con cicatrices de una antigua cirugía, hizo necesario realizarle un reemplazo de hombro reverso. La intervención resultó más compleja de lo previsto, pero concluyó con éxito. El sacerdote fue dado de alta este 18 de noviembre y continuará su recuperación en casa.
Ahora deberá usar un cabestrillo durante varias semanas y luego iniciar una rehabilitación que se extenderá entre 3 y 4 meses, con terapia física dos veces por semana.
En conversación con ChurchPOP, el P. Núñez reconoció que el accidente pudo haber sido mucho más grave, pues rodó “por un terreno perpendicular hasta la calle”. Sin embargo, asegura que sintió la mano de Dios protegiéndolo y evitando lesiones más severas.
“Me sentí protegido por Dios, ya que ni la cabeza ni la cara sufrieron ninguna fractura. La mayor parte del impacto fue en el lado izquierdo de mi cuerpo, especialmente de mi brazo, rodilla y pierna. La cirugía del hombro duró casi 4 horas. El dolor de la pierna ha mejorado”, señaló.
El sacerdote expresó, además, su gratitud por el acompañamiento espiritual de tantas personas que han rezado por él en estos días de dificultad.
“Doy gracias a Dios porque se que me liberó estando conmigo en mis momentos de más necesidad. Doy gracias a Dios por todas las personas que se han preocupado por mi salud y les pido que sigan orando por mi”.
En un video que grabó para agradecer a quienes han pedido por su recuperación, el P. Núñez se mostró esperanzado y fortalecido en la fe, asegurando que es un soldado que “se ha caído, pero no está derrotado”.
Estas son las palabras del P. Núñez:
“Alabado sea Jesucristo, el más hermoso. Solamente para decirles, desde lo profundo de mi corazón, un millón de gracias por sus oraciones, por su cariño, por estar siempre presente en mis necesidades. Pues aquí hay un soldado que se ha caído, pero no está derrotado: está en victoria con el favor de Dios.
Ya dentro de poco estaré restablecido y, por la gracia de Dios, continuaremos con nuestro servicio de expandir la Palabra de Dios a todos los corazones y a todas las personas que, de buena voluntad, quieran escuchar, como ustedes, por ejemplo.
Muchísimas gracias por su amor, por su apoyo y, sobre todo, por orar por mí. Que, con el favor de Dios, yo creo que en unas pocas semanas ya voy a estar de nuevo en la zona de combate. Que el Señor vaya detrás de ustedes para que les proteja, delante de ustedes para que les guíe y sobre ustedes para que les bendiga, hoy y siempre. En nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén”.