Los hermanos, Renato Pudar, Marko Pudar y Robert Pudar, decidieron dar su vida a Dios y se ordenaron el mismo día. La foto de su madre dando la bendición a dos de ellos ha dado la vuelta a las redes sociales.

Según indica Shalom World, el sábado 24 de junio, Robert Pudar fue ordenado diácono, mientras sus dos hermanos, Renato y Marko, se ordenaron sacerdotes para la Arquidiócesis de Split-Makarska y la Provincia Franciscana del Santísimo Redentor, respectivamente.

La ceremonia se celebró en la Iglesia de la Sagrada Familia en Solin, donde también se ordenaron sacerdotes otras 4 personas, y fue presidida por el Administrador Apostólico de la arquidiócesis, Mons. Želimir Puljić.

“No teman a su debilidad cuando Dios llama. Entréguense completamente y sin reservas a la Providencia de Dios, y Él los fortalecerá y animará. Podrán hacerlo todo en aquel que los fortalece. Él cuenta con ustedes y desea realizar grandes planes en este mundo a través de ustedes”, señaló Mons. Puljić.

“El sacerdocio es el ‘amor del corazón de Jesús’. Es un amor sin egoísmo, un dar sin reservas y un servicio sin condiciones. Cuando el candidato para la ordenación acepta estos tres aspectos, de manera indirecta está declarando que está listo, armado y dispuesto a servir a Dios y a los seres humanos”, agregó.

Una foto con un mensaje que ha tocado a las redes

El 2 de julio de 2023, los hermanos Marko y Renato celebraron su primera Misa en la parroquia de San Juan Bautista en Grab.

Durante la celebración, su hermano Robert sirvió como diácono, junto a Damir Vrbešić, diácono de la Diócesis de Kotor.

En un momento de la Misa, el Padre y la madre de los 3 jóvenes se acercaron a darles la bendición a los nuevos sacerdotes, una imagen que ha conmovido a las redes sociales.

“Lo más bonito que verás hoy...antes que sacerdotes fueron hijos. Y en adelante serán los hijos sacerdotes de esta madre. ¡Cuánto valor en la bendición de unos padres!”, indicó el P. Jorge Enrique Mújica, que compartió la foto en sus redes.

Oremos para que más jóvenes digan sí a la vida consagrada.

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