Las curiosas imágenes de vidrio que atraen hasta a los no creyentes a una parroquia

Steamboat Springs es una ciudad de Colorado, Estados Unidos, en donde se ubica una curiosa iglesia cuyas imágenes de vidrio atraen hasta a los no creyentes.

La Iglesia del Santo Nombre fue reacondicionada hace algunos años en un proyecto que reunió a toda la comunidad, incluso a los no católicos. La iglesia fue remodelada y todas las ventanas fueron reemplazadas con hermosos vitrales que se convirtieron en el principal atractivo de la parroquia. Pero hay una de todas ellas que se convierte en visita obligada para los turistas.

Las curiosas imágenes de vidrio que atrae hasta a los no creyentes a una parroquia

La más conocida de las vidrieras es la de “Jesús esquiando”… ¡¿Cómo es eso?! Así le dicen los lugareños a este vitral en el que Cristo parece tener esquíes y estar a punto de descender de la montaña.

“Mucha gente lo llama el Jesús del Esquí. Jesús baja del cielo para hablar a la gente, y todos están de pie allí con las rodillas dobladas, escuchando a Jesús y orando. Los dos rayos en la parte inferior parecen como si tuviera los esquís puestos y, debido a que representa la montaña de esquí, parece que está bajando a esquiar”, comenta una feligresa.

Pero nada de eso. Se trata de la representación de la Segunda Venida de Cristo tal como se la imaginan los feligreses en su propio pueblo. Está inspirada en la Carta a los Filipenses 2, 10-11 que dice: “al nombre de Jesús, se doble toda rodilla“. Por eso la gente está de rodillas adorando a este Jesús en su gloria.

Hay un vaquero y su caballo, un border collie, un ciclista, un esquiador, un snowboarder, niños, gente mayor… (¿Qué otras cosas contemporáneas puedes identificar?)

“Uno de los valores de la arquitectura y el arte de la iglesia es que surge de la cultura de la gente, allí mismo”, dijo el padre Ernest Bayer, encargado de la parroquia.

Y agrega: “El vidrio es un medio especialmente milagroso porque no parece nada hasta que la luz brilla a través de él. Es como si la luz de Dios penetrara en este medio y se llenara de gloria, belleza, significado y revelación”.

“La gente siempre dice, ‘Dios mío, esa iglesia es tan bonita que me gustaría poder entrar’”, comenta el sacerdote. “Está abierto a todos, no importa cuál sea su fe. Y hazte un favor, ven a la iglesia por la noche y quizás te sientes accidentalmente durante una misa“, concluye.