Frank Morera, experto en apologética, y fundador de la página web Apologética Siloé, explica que muchos católicos confunden el sentido del “saludo de la paz” en la Misa. Incluso los sacerdotes lo practican, según el charlista, de una forma equivocada.
“El signo de la Paz no es saludo”, se titula su charla; explica que la problemática actual es el desorden que algunos fieles y sacerdotes causan al momento de dar el saludo de la paz. Muchos salen de sus sitios para ir a saludar a otros presentes en la Misa. Hasta el sacerdote baja del altar para poder hacer lo mismo.
Ante esto, algunos obispos indicaban al Papa Benedicto XVI que sería buena idea que el “signo de la Paz” se dé antes del Credo, para evitar dicho desorden. El Papa respondió que la solución no es mover el momento de la Paz, sino explicarlo mejor.
El signo de la paz se da correctamente hacia las personas que estén a los costados. Así también a las personas que se encuentran atrás o adelante de uno.
Hay que recordar que este signo tiene como sentido concretizar lo que Cristo nos pidió antes de comulgar, que es reconciliarte con el hermano antes de acercarte al altar.
Ahora bien, si aquella persona con la que no estás en paz no se encuentra en ese momento, el saludo de la paz a otros es un símbolo de querer reconciliarse con esta.
Evidentemente, esto no reemplaza el hecho de que tienes que tender puentes de reconciliación con ella en tu vida. Pero, en ese momento de la Misa, debes desearle al otro que la paz esté con él y que pueda tenerla con aquellos con las que ha peleado.
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