El viaje del Papa Francisco a Canadá dejó múltiples enseñanzas y aprendizajes, pero hubo un pequeño gesto que emocionó a tanto a no creyentes como a católicos: la bendición de Everly, una niña con una rara enfermedad.

Durante su estadía en Quebec, el día jueves, el Santo Padre celebró una misa matutina en la basílica de Sainte-Anne-de-Beaupré. Allí asistieron Simeon Tshakapesh, su esposa Ruby y su nieta Everly.

La pequeña Everly tiene el síndrome 3M, un raro trastorno genético caracterizado por bajo peso al nacer, enanismo, anomalías en la cabeza y el área facial y malformaciones esqueléticas.

Fue al final de la celebración cuando un gesto del Papa Francisco conmovió a todos los que presenciaban la misa en la iglesia y en sus hogares.

Ruby se acercó al Papa y le entregó a Everly para que la bendijera. Entonces, el Santo Padre, la besó en la frente, la levantó, la bendijo y la tuvo en su regazo.

La bendición del Papa Francisco a Everly, una niña con una rara enfermedad

Aquí puedes ver el conmovedor momento

“Todos querían conocerla”, dijo Simeon Tshakapesh a CBC News el jueves. “Estaba por toda la iglesia… Por eso estamos aquí, por Everly”.

Su abuelo Simón dijo que el jueves es un día que la pequeña recordará cuando sea mayor, con las fotografías que tomó para marcar la ocasión.

“Dijeron: ‘Everly es una bebé muy fuerte y le irá mucho mejor’. Eso es todo lo que queríamos escuchar de la gente, porque Everly tiene una condición muy grave”, dijo Simón.

“Todo lo que necesitábamos era que fuera bendecida. Estoy muy complacido con eso”, agregó.

¡Oremos por la pequeña Everly!  

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