El futbolista profesional y capitán del equipo “Charlotte Independence”, Clay Dimick, salió al campo con unas zapatillas muy especiales, para promocionar un centro que ayuda a estudiantes universitarias embarazadas.
Este 16 de marzo, durante el partido contra Knoxville, el jugador católico anotó un gol, uno dedicado a las mamás y los niños del hogar MiraVia. Aunque el partido no acabó con un resultado a favor de su equipo, definitivamente su gesto valió más que cualquier victoria.
Las zapatillas que usó en este partido fueron diseñadas por la artista Jaylin Roman y lleva la frase “A Miraculous Way for Moms” (Un camino milagroso para las mamás), en relación al nombre del apostolado “Camino milagroso” en Latin.
Esta iniciativa es parte de la campaña “Zapatillas por una Causa”, que busca apoyar a las estudiantes universitarias embarazadas y ser una fuente de esperanza para las madres de la comunidad de Carolina del Norte (Estados Unidos).
En un artículo para National Catholic Register, la periodista SueAnn Howell contó la historia de Dimick y su relación especial con esta causa.
“Mi madre biológica también era estudiante universitaria cuando me dio a luz, y ver cómo MiraVia bendice a tantas madres e hijos en una situación tan similar fue realmente especial”, comentó el futbolista.
El jugador de fútbol, que es adoptado, fue alumno del Belmont Abbey College, donde se encuentra la residencia universitaria de MiraVia.
"Creo que la forma en que el Abad Plácido Solari, la comunidad monástica y la familia de la [Abadía de Belmont] reciben a las jóvenes madres en MiraVia es ... el amor de Cristo ejemplificado. La forma en que toda la comunidad se une en torno a estas valientes y maravillosas madres es muy alentadora", resaltó.
Dimick agregó que durante su tiempo en la universidad estaba más enfocado en el fútbol y en disfrutar su tiempo como estudiante que en la fe.
“No era católico en ese momento; de hecho, ni siquiera estaba seguro de qué era o en qué creía la Iglesia Católica. Durante mi tiempo en la universidad, llegué a conocer a Jesús y su Iglesia a un nivel más profundo", dijo.
“No podría estar más agradecido por la verdad que se me reveló", enfatizó.
El futbolista se convirtió al catolicismo y resalta que desde que dió ese paso, ni bien graduarse de la universidad, busca “glorificar a Dios en todas las cosas: mi matrimonio, con mis dos hijos, mi carrera profesional de fútbol —y todo lo demás".
“Usar este par de botines dedicados a MiraVia es una oportunidad única para glorificar a Dios y llevar luz a una organización especial”, dijo.
“Es importante para mí usar el talento con el que Dios me ha bendecido para glorificarlo y también usarlo como una oportunidad para apoyar a organizaciones en las que realmente creo. Estoy realmente honrado y conmovido de poder representar a MiraVia y todo lo que están haciendo”.
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