Seis horas antes de partir de este mundo hacia el abrazo eterno del Padre, San Juan Pablo II pronunció en voz débil su última frase, unas palabras en su idioma natal.
Las últimas palabras de San Juan Pablo II han quedado inmortalizadas en documentos que conmemoran su último día en este mundo.
El sábado 2 de abril de 2005, Karol Wojtyla se despidió de sus más cercanos colaboradores de la Curia romana. Las oraciones continuaron sin cesar junto a su cama, en la que participó a pesar de la fiebre alta y la debilidad extrema.
Por orden de Benedicto XVI, importantes detalles sobre la muerte del Papa polaco fueron recogidos en un informe publicado en septiembre del mismo año, que fue vinculado al boletín oficial del Vaticano, el Acta Apostolicae Sedis.
Con más de 200 páginas, el informe describe la partida del Papa Peregrino hacia Dios, que tuvo lugar el sábado, día dedicado a la Virgen.
Las últimas palabras de san Juan Pablo II antes de su muerte
Karol Wojtyla entró en coma alrededor de las 19:00 horas y falleció a las 21.37 horas. Sin embargo, sobre las 15:30 horas, a pesar de estar muy frágil, afiebrado y con un tubo en la garganta, reunió las pocas fuerzas físicas que le quedaban para pronunciar su conmovedora frase de despedida.
En su lengua materna, el polaco, seis horas antes de su muerte, hizo una pequeña pero clara petición:
“Déjame ir a la Casa del Padre”
El Santo Padre había acordado previamente con los médicos no ir al hospital sino permanecer en el Vaticano, donde se había asegurado la asistencia médica esencial.
Quería sufrir y morir en su hogar, permaneciendo junto a la tumba del apóstol Pedro; en cuya plaza se habían reunido miles de fieles, especialmente jóvenes, que gritaban: "Juan Pablo II" y "¡Viva el Papa!".
San Juan Pablo II, ¡ruega por nosotros!