¿Alguna vez has leído el consejo de San Juan Crisóstomo para los esposos? Si no lo has hecho, definitivamente deberías ¡Es absolutamente hermoso!
Tanto así, que incluso el Catecismo de la Iglesia Católica (CIC) cita las palabras de este Doctor de la Iglesia al momento de hablar sobre los esposos (CIC 2365).
En su vigésima homilía a los Efesios, San Juan Crisóstomo discute el amor entre esposo y esposa. En una parte de su homilía analiza las palabras que un joven esposo debería decirle a su esposa:
“Te cortejé, y te amo, y te prefiero a mi propia alma. Porque la vida presente no es nada. Y oro, y suplico, y hago todo lo que puedo, para que podamos ser considerados dignos para vivir esta vida presente, para que podamos estar en el mundo unirnos tú y yo en perfecta seguridad.
Porque nuestro tiempo aquí es breve y fugaz. Pero si nos consideramos dignos por haber complacido a Dios para que intercambie esta vida por esa [el cielo], entonces siempre estaremos los dos con Cristo, con abundante placer.
Valoro tu afecto por encima de todas las cosas, y nada es tan amargo ni tan doloroso para mí como para estar en desacuerdo contigo“.
¡Qué palabras tan impresionantes! Incluso el teólogo católico Scott Hahn citó sus palabras como un gran consejo para los esposos.
Si cada pareja se amara de esta manera, ¡qué mundo tan diferente sería!
Oremos por todas las parejas casadas, así como por las que están discerniendo y se preparan para el matrimonio.
San Juan Crisóstomo, ¡ruega por nosotros!