En la pequeña ciudad de Allouville-Bellefosse, norte de Francia, se puede encontrar una de las capillas más peculiares del mundo.

Los científicos creen que el gran roble tiene al menos 800 años, lo que lo convierte en el árbol más antiguo de toda Francia.

La tradición local dice que el árbol comenzó a crecer durante el reinado de Carlomagno, y que Guillermo el Conquistador rezó ante su base ¡Si esto es cierto, el árbol tendría entre 1000 y 1200 años!

Lo que se sabe con certeza es que el árbol fue alcanzado por un rayo en el siglo XVII. El rayo inició un incendio dentro del árbol y quemó su interior, dejando la cáscara todavía en pie.

El sacerdote del pueblo, el Padre Du Cerceau, pensó que el árbol era especial y construyó una pequeña capilla en su interior. Años más tarde, erigieron una segunda capilla en la parte superior del árbol, con una escalera exterior para acceder a ella. La capilla ha sido conocida como la “Capilla de Chêne”, o capilla de roble en español.

Este es un dibujo de la capilla del árbol de mediados del siglo XVIII:

Pierre dufeuille, dominio público, Wikimedia Commons

Durante la Revolución Francesa, la capilla del árbol estuvo en riesgo de ser destruida. Una multitud enojada apareció para quemar el árbol, pero un poblador les dijo que lo había convertido en un “Templo de la Razón”, evitando su destrucción. Cuando la crisis terminó, el lugar volvió a ser usado como una capilla.

Hoy, el árbol ya no puede sostenerse por sí mismo. Se han agregado postes para ayudar a mantener el árbol en pie y esas tejas de madera en su exterior se agregaron a lo largo de los años en los lugares donde la corteza del árbol cayó.

La capilla sigue siendo un lugar de oración. La Misa católica se celebra al menos dos veces al año.

Estas son algunas fotos de la hermosa capilla:

Ji-Elle, dominio público, Wikipedia

Le ghola, Wikimedia Commons

piratpl2012, Flickr

Le ghola, Wikipedia Commons

a través de patrick.cuvillier.fr

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piratpl2012, Flickr

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