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Luego de que Fidel Castro asumiera el poder en Cuba en 1959, él pasó la siguiente década imponiendo progresivamente el socialismo en el país, incluyendo el ateísmo de estado. En 1960, muchos obispos cubanos firmaron una carta reafirmando la posición de la Iglesia en contra del comunismo y llamaron a los católicos a rechazarlo. En respuesta, el gobierno confiscó las propiedades católicas y arrestó a muchos fieles. Entonces, en 1969, Fidel Castro prohibió la celebración de la Navidad.
Esta prohibición de una de las más grandes fiestas de la Iglesia duró aproximadamente tres décadas hasta 1998 cuando, por gracia de Dios, San Juan Pablo II le convenció de permitir nuevamente la Navidad. Joaquín Navarro-Valls, el portavoz de la Santa Sede en 1990, recientemente ha compartido esta interesante historia con Vatican Insider.
“Le expliqué (a Fidel Casro). que, como ya había sido fijada la fecha de la visita (del Papa), el 21 de enero de 1998, era interesante que fuera un gran éxito”, compartió Navarro-Valls. “‘Cuba necesita sorprender al mundo’, le dije. Fidel se declaró de acuerdo”.
“Entonces yo añadí algo sobre las sorpresas que el Papa se esperaba. Le pedí a Castro que la Navidad, a la vuelta de la esquina, se celebrara en Cuba como una fiesta oficial por primera vez desde el inicio de la revolución”.
¡Qué valiente solicitud! Esta fue la respuesta de Castro según Navarro-Valls:
“Dijo que habría sido muy difícil, la Navidad caía en plena cosecha de la caña de azúcar. Respondí: ‘Pero el Santo Padre querría poderle agradecer públicamente este gesto desde su llegada al aeropuerto de La Habana’“.
“Entonces, después de una larga discusión, Castro acabó diciendo que sí. Aunque añadió: ‘Pero podría ser solo por este año’. Le limité a decir: ‘Muy bien, el Papa le estará muy agradecido. Y en cuanto al año próximo, ya se verá'”.
“Como se sabe la fiesta de Navidad siguió siendo desde entonces fiesta civil”.
¡Así que fue un éxito!
Puedes leer la entrevista completa en Vatican Insider.
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