En el primer fin de semana del Sínodo de Obispos 2018 sobre la juventud se celebró en el Vaticano un encuentro entre el Papa Francisco y los jóvenes que participan del evento.
En este encuentro se compartieron muchos testimonios, todos muy impactantes para el Santo Padre y los presentes.
Uno de los testimonios fue de un joven italiano llamado Dario Urbano, quien confesó haber sido víctima de la adicción a la pornografía.
Todo comenzó con la muerte de su padre cuando tenía 5 años. Esta pérdida dejó un vacío profundo en él y su familia.
Intentó de muchas formas llenar ese vacío, y así se topó, a los 10 años de edad, con la pornografía.
Lo capturó y creyó encontrar ahí la sensación de amor. Pero poco a poco comprendió que en realidad se destruía por dentro.
Un día su madre lo invitó a un encuentro de oración en su parroquia. Y fue gracias a un abrazo que se sintió realmente amado.
Asegura que sintió una fuerza, un fuego en su interior. Comprendió que ese fuego era Cristo que se hacía carne y se convertía en un abrazo.
Por otro lado descubrió que el Evangelio le pedía ser responsable de su propia vida. Y que tenía que parar de verse como un niño que necesitaba a un padre.
El final de su lucha fue feliz. Superó su adicción, se casó y junto a su esposa da testimonio ante los jóvenes sobre cómo combatir la pornografía, la belleza de la vida familiar y lo hermoso que es vivir con Dios y para Dios.
Roguemos a Dios para que nos dé las suficientes herramientas para librarnos de este mal. Y para que más testimonios como este nos llenen el corazón de esperanza frente a esta adicción.
Te compartimos el video aquí: