El padre Eduardo Hayen Cuarón, director del semanario Presencia de la diócesis mexicana de Ciudad Juárez, alertó a través de su cuenta de Twitter sobre la existencia "brujos católicos".
El padre Hayen Cuarón señaló que estas personas "mezclan las imágenes sagradas y el agua bendita con la brujería. Dicen que todo “culto” es culto a Dios, que Dios es amor y que Jesucristo viene a salvar a todos, sin importar lo que se practique".
Algunos usuarios señalaron que difícilmente puedan considerarse "católicos" a quienes realizan estas prácticas contrarias a la fe. Pero el sacerdote explicó que "son brujos católicos en el sentido de qué están bautizados muchos de ellos".
En este sentido, el padre Hayen Cuarón señala que "la brujería expulsa la gracia de Dios en ellos, pero por su bautismo continúan siendo miembros de la iglesia. Todos estamos en camino de conversión".
El Catecismo de la Iglesia Católica enseña que "todas las prácticas de magia o de hechicería mediante las que se pretende domesticar potencias ocultas para ponerlas a su servicio y obtener un poder sobrenatural sobre el prójimo —aunque sea para procurar la salud—, son gravemente contrarias a la virtud de la religión" (CIC 2117).
De la misma forma, "llevar amuletos es también reprensible. El espiritismo implica con frecuencia prácticas adivinatorias o mágicas. Por eso la Iglesia advierte a los fieles que se guarden de él".
Además de las enseñanzas del Magisterio de la Iglesia, la Biblia condena explícitamente estas prácticas.
Levítico 20,1.27 :
"Habló Yahveh a Moisés y dijo: 'Hombre o la mujer en que haya espíritu de nigromante o adivino, morirá sin remedio: los lapidarán. Caerá su sangre sobre ellos'"
Gálatas 5,17-21 :
“Pues la carne tiene apetencias contrarias al espíritu, y el espíritu contrarias a la carne, como que son entre sí antagónicos, de forma que no hacéis lo que quisierais. Pero, si sois conducidos por el Espíritu, no estáis bajo la ley. Ahora bien, las obras de la carne son conocidas: fornicación, impureza, libertinaje, idolatría, hechicería, odios, discordia, celos, iras, rencillas, divisiones, disensiones, envidias, embriagueces, orgías y cosas semejantes, sobre las cuales os prevengo, como ya os previne, que quienes hacen tales cosas no heredarán el Reino de Dios”.
Apocalipsis 21,8 :
“Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables, los asesinos, los impuros, los hechiceros, los idólatras y todos los embusteros tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre: que es la muerte segunda.”
Hechos 8, 9. 20-23 :
“En la ciudad había ya de tiempo atrás un hombre llamado Simón que practicaba la magia y tenía atónito al pueblo de Samaria y decía que él era algo grande.
Pedro le contestó: 'Vaya tu dinero a la perdición y tú con él; pues has pensado que el don de Dios se compra con dinero. En este asunto no tienes tú parte ni herencia, pues tu corazón no es recto delante de Dios. Arrepiéntete, pues, de esa tu maldad y ruega al Señor, a ver si se te perdona ese pensamiento de tu corazón; porque veo que tú estás en hiel de amargura y en ataduras de iniquidad.'”
¡Oremos por la conversión de los pecadores!