El sacerdote Tony Van Hee, jesuita de 83 años, fue arrestado bajo el insólito cargo de intimidar a los clientes de una clínica abortista por haber protestado pacíficamente a menos de 50 metros de una clínica abortista en Ottawa, Canadá.
Este sacerdote es conocido por haber hecho ayuno y oración al frente del parlamento canadiense por 30 años, como protesta contra las leyes abortistas.
El 24 de octubre de 2018, el Padre Tony se encontraba sentado cerca de un hospital abortista llevando un par de letreros que decían: “El primado de la libertad de expresión es la piedra angular de la civilización occidental “, y el otro: “Sin la libertad de expresión, el estado es un cadáver”.
En el momento del arresto, la policía indicó que el sacerdote estaba intimidando a los clientes abortistas, violando una ley que prohíbe manifestaciones contra el aborto a menos de 50 metros de un hospital abortista.
Ya que ninguno de sus carteles mencionaba directamente el aborto, la policía se vio obligada a retirar el cargo por intimidación, pero lo acusaron de violar otras dos normas:
(1) “Ninguna persona debe informar, o intentar informar, a una persona sobre cuestiones relacionadas con los servicios de aborto, por ningún medio, incluidos los medios orales, escritos o gráficos”
(2) “Ninguna persona debe realizar o intentar realizar un acto de desaprobación con respecto a cuestiones relacionadas con servicios de aborto, por cualquier medio”.
Alberto Polizogopoulos, abogado del sacerdote, indicó que había un error en la imputación tanto del cargo por intimidación como de los otros dos: el sacerdote nunca se había manifestado en contra del aborto. En sus letreros, el padre criticaba los atentados contra la libertad de expresión, en ningún momento menciona el aborto.
Si bien el arresto fue momentáneo, el sacerdote aún tendría que comparecer en un tribunal y podría tener una multa de 5000 dólares. Él indicó que no pagaría la multa, y si sería arrestado por eso, ayunaría y oraría desde la cárcel.