El 10 de octubre Carlo Acutis fue reconocido como Beato y su fiesta será el 12 de octubre, día en que dejó la tierra y nació al cielo.

Este beato adolescente de jeans y zapatillas como se lo describe, muestra que el ideal de santidad es más cercano de lo que muchos católicos creen. Ser santos no es para los héroes sino para los humildes y los que aman a Dios y hacen su voluntad día a día.

El Beato Carlo Acutis llegó al cielo haciendo estas cosas. ¡Imitémoslo y vayamos al encuentro del  Señor!

6 cosas que guiaron al Beato Carlo Acutis al Cielo y puede guiarte a ti también

1. Eucaristía

“Desde que era niño sintió la necesidad de la fe y tenía la mirada vuelta a Jesús. El amor por la Eucaristía fundaba y mantenía viva su relación con Dios. Solía decir: ‘La Eucaristía es mi autopista al cielo‘.

Cada día participaba de la Santa Misa y permanecía en adoración por mucho tiempo en frente del Santísimo Sacramento. Carlo decía: ‘Vas directo al Paraíso si te acercas todos los días a la Eucaristía'”, cuenta el cardenal Agostino Vallini.

Nicola Gori, el sacerdote impulsor de su causa de beatificación, dijo:

Logró arrastrar a sus familiares, a sus padres a misa todos los días. No fue al revés; no fueron sus padres quienes llevaron al niño a misa, sino que fue él quien logró ir a la misa y convencer a los demás de que recibieran la comunión todos los días”.

Carlo solía decir: “cuanto más a menudo recibamos la Eucaristía, más seremos como Jesús, de modo que en esta tierra tendremos un anticipo del cielo“.

2. El amor a la Virgen María y el Santo Rosario

Cuando el Beato Carlo Acutis tenía tres años comenzó a pedirle que lo llevara a la iglesia para saludar a Jesús y solía recoger flores para llevárselas a la Virgen. Así lo comentó su madre al periódico italiano Corriere della Sera.

Fue muy devoto de Nuestra Señora, rezó el Rosario todos los días, se consagró varias veces a María para renovar su cariño y suplicar su protección.

Solía decir, “La Virgen María es la única mujer en mi vida“.

3. Amor al prójimo

Era conocido por defender a los niños en la escuela que eran molestados, especialmente a los niños discapacitados. Cuando los padres de un amigo se iban a divorciar, Carlo hizo un esfuerzo especial para incluir a su amigo en la vida familiar.

Francesca Consolini, postuladora de la Arquidiócesis de Milán de su causa de beatificación afirmó:

“Su fe, que era única en una persona tan joven, era pura y segura. Le hacía ser siempre sincero consigo mismo y con los demás. Mostró un cuidado extraordinario por los demás; era sensible a los problemas y situaciones de sus amigos y de quienes vivían cerca de él y estaban con él día a día”.

Su madre cuenta que por las tardes solía salir a llevar comida y bebidas calientes a las personas sin hogar. Su ejemplo convirtió al catolicismo a un empleado hindú de su familia. Relató que Carlo servía “en las mesas de los pobres, las de las hermanas de la Madre Teresa de Calcuta en Baggio y las de los capuchinos donde servía como voluntario”.

4. Penitencia

Aun siendo un adolescente, el Beato Carlo Acutis buscó privarse de ciertas cosas que le gustaban para llevar una vida cristiana más íntegra.

Según comenta CNA, a Carlo le encantaba jugar videojuegos. Su consola preferida fue una Playstation, o posiblemente una PS2, que se lanzó en 2000, cuando Carlo tenía nueve años. Sabemos que solo se permitía jugar una hora a la semana, como penitencia y disciplina espiritual, pero quería jugar mucho más.

5. Entregar lo mejor de sí a Dios

Desde pequeño Carlo mostró un gran interés por la tecnología y la informática y tuvo facilidad para aprender sobre ello. Pero decidió que debía usar su talento para dar gloria a Dios.

Por eso, el Beato Carlo Acutis usó su conjunto de habilidades tecnológicas para construir un catálogo completo de milagros eucarísticos en todo el mundo. Comenzó el proyecto de un año cuando tenía 11 años que también utilizó en la enseñanza del catecismo a los niños.

Se inspiró en las iniciativas del Beato Giacomo Alberione de utilizar los medios de comunicación para anunciar el Evangelio.

6. Entregar su sufrimiento a Dios

Cuando le diagnosticaron leucemia, asumió la enfermedad con una inmensa fe y ofreció todos sus sufrimientos por el Papa Benedicto XVI y la Iglesia. “Ofrezco todo el sufrimiento que tendré que sufrir por el Señor, por el Papa y por la Iglesia“, dijo el joven.

En una ocasión su médico le preguntó si sufría mucho dolor y respondió que “hay gente que sufre mucho más que yo”.

Estoy feliz de morir porque he vivido mi vida sin perder un minuto en esas cosas que no agradan a Dios”, dijo el Beato Carlo Acutis en sus últimos días.

¡Imitémoslo! 

¡Beato Carlo Acutis, ruega por nosotros!

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