Las herejías trinitarias o de la Santísima Trinidad creencias erróneas sobre este misterio revelado del Dios Uno y Trino.

Sólo hay un Dios, que se ha revelado a nosotros en tres personas, co-iguales, co-eternas, el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. La doctrina de la Trinidad es la más importante de la Iglesia, ya que se refiere a la naturaleza misma de Dios.

Sin embargo, es también la más confusa. Así que este Domingo es un buen momento para aclarar conceptos erróneos sobre la Trinidad.

Aquí están 5 herejías trinitarias comunes que deberías evitar.

1) Negar que el Espíritu Santo es una persona

Algunas veces se piensa que la Trinidad es “dos alguien y un algo”. En realidad, la Trinidad son tres alguien: el Espíritu Santo es una persona, tanto como el Padre y el Hijo.

El Espíritu Santo no es una “fuerza”, y tampoco simplemente “acciones de Dios en el mundo”. Él es una persona completa y distinta.

2) Modalismo

Esta es una antigua herejía que indicaba que la Trinidad sólo son tres modos o máscaras que Dios va cambiando.

Es decir, Dios estaría a veces en modo de Padre, a veces en modo Hijo, y otras veces en modo Espíritu Santo; y solo puede estar en un modo a la vez. Esto es equivocado, ya que es un solo Dios, y las personas de la Trinidad son inseparables.

3) El Dios del Antiguo Testamento es solo el Padre

El Hijo y el Espíritu Santo se revelan más claramente en el Nuevo Testamento, pero eso no quiere decir que no estaban allí antes de eso.

Las tres personas de la Trinidad, entre ellos el Hijo y el Espíritu Santo, existen eternamente y actúan junto al Padre en perfecta armonía.

Eso significa que el Dios revelado en el Antiguo Testamento es el mismo Dios que se encarnó en la persona de Jesús.

4) Triteísmo

Es importante que quede claro que creemos que hay un solo Dios. Las tres personas de la Trinidad son Dios, pero no son tres dioses.

Más bien, ellos comparten la misma sustancia divina. Tres personas, una sola sustancia divina. Ese es el lenguaje aprobado por la Iglesia.

5) Género cambiante

Dios no es presentado como “la madre, la hija y el Espíritu.”  Por supuesto, Dios no tiene género (aunque Dios como un ser humano en Jesús lo tiene), pero además del hecho de que estos términos fueron revelados por Dios mismo para describirse a sí mismo, este lenguaje también tiene un significado teológico importante que se debe respetar.

Dios es Padre en su relación con la creación, ya que Él creó el mundo. El principio femenino, por el contrario, es receptivo, y así se identifica a la creación ( “Madre Tierra”) y la Iglesia ( “Madre Iglesia”).

¡Qué importante es conocer estas herejías trinitarias para evitar los errores de la fe!

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