San Francisco Javier fue un sacerdote y misionero jesuita nacido en 1506 en Navarra, España. Llevó una vida de entrega total a Dios y a la misión y su lema fue “¿De qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero, si se pierde a sí mismo?”.
Murió en 1552, a los 46 años de edad, a causa de una fiebre. Fue canonizado en 1622 por Gregorio XV y nombrado patrono de las misiones en 1927 por el Papa Pío XI.
Aquí te compartimos 3 datos que tal vez no conocías sobre él:
Fue el primer misionero jesuita en la India
El santo participó de la primera expedición misionera de la Compañía de Jesús a la India. Su misión era partir de Goa, colonia portuguesa en Asia, hacia tierras desconocidas de la India.
Fue expulsado de Japón
En 1549 logró llegar al Japón gracias a sus hermanos misioneros y a dos japoneses que se habían convertido al cristianismo. Le bastó un año para convertir a 100 japoneses a la fe católica y por eso las autoridades de Japón lo expulsaron y le prohibieron volver.
Fue canonizado junto a 4 grandes santos
San Francisco Javier fue canonizado por el Papa Gregorio XV junto a otros cuatro grandes santos: San Ignacio de Loyola, Santa Teresa de Jesús, San Isidro Labrador y San Felipe Neri.