El sacerdote peruano que padecía un cuadro grave de coronavirus fue dado de alta hace pocos días y afirma que su recuperación fue “un milagro de Jueves Santo”.

Luis Núñez del Prado es presbítero diocesano de la parroquia de San Gabriel Arcángel, distrito de Villa María del Triunfo en la Diócesis de Lurín.

El 11 de marzo fue internado de urgencia en el Hospital Edgardo Rebagliati con un cuadro de neumonía atípica causado por el coronavirus. Inmediatamente recibió asistencia pulmonar y permaneció con respirador artificial casi un mes.

Pero lo más increíble fue el día en que le retiraron el respirador: “Es un milagro porque el Jueves Santo es el día sacerdotal. Es un regalo, es un signo de Dios, como Dios ama a sus hijos sacerdotes”, declaró el padre Luis a RPP Noticias.

Y es cada Jueves Santo se celebra el día del sacerdote, porque ese es el día en que Jesús instituyó el Sacramento del Orden sacerdotal.

“En este día, los sacerdotes del mundo entero son invitados a concelebrar la Eucaristía con sus obispos y a renovar a su alrededor las promesas de sus compromisos sacerdotales al servicio de Cristo y de su Iglesia”, mencionaba san Juan Pablo II en una carta a los sacerdotes en 1986.

Ese mismo día, el padre Luis siente que Dios lo rescató y le dio una nueva oportunidad. Desde allí su mejoría fue en progreso.

Ya dado de alta, el sacerdote recuperado de coronavirus nos dice: “Nunca pierdan la esperanza, nunca pierdan la fe. Hay que seguir luchando, sí se puede. Hay que ser fuertes y valientes, porque Dios nos da esa fortaleza“.

¡Señor, te pedimos por todos los sacerdotes!

[Ver: ¡El Rosario para la pandemia! 5 plegarias contra el coronavirus para agregar a tu rezo]

[Ver: Todo lo que tienes que saber sobre los evangelios apócrifos para que no te engañen]

Comparte