Murió el Padre Antonio Ricieri Barani el pasado lunes 22 de julio a sus 102 años de edad. Así lo informó la página web principal de los hermanos redentoristas, A12.com. Él es considerado por muchos, como el sacerdote misionero redentorista más antiguo de Brasil.
Oriundo de este mismo país, nació el 24 de diciembre de 1916, viviendo así todos los cambios sociales, políticos y económicos que caracterizaron el siglo XX.
Fue sacerdote de la Congregación del Santísimo Redentor, congregación de San Alfonso María de Liguori. Fue ordenado el 6 de enero de 1949 en la iglesia de San Juan Bosco en la ciudad de Goiânia, estado de Goiás, cerca al centro de Brasil.
Fue también pionero de las comunicaciones por donde iba, ya que instaló el altavoz y el servicio de sonido y también fue responsable de llevar, por primera vez, el cine a la capital Goiânia.
El Padre Barani vivía en el Convento de la Santísima Trinidad, junto a la Iglesia Madre de la Trinidad, hasta el día de su muerte. Sus últimas acciones como misionero fue viajar a todas las iglesias de su misión a celebrar la Misa de las 9 de la mañana.
Su vida y todas sus aventuras en sus misiones se encuentran grabadas en su libro “Mis 100 años con el niño Jesús”.