La activista pro-vida Obianuju Ekeocha compartió en sus redes sociales la historia de Albi, un bebé con una grave malformación. Los médicos informaron a sus padres que el niño no sobreviviría al parto.

En la publicación se lee:

“Siempre que un bebé por nacer se le diagnostica una condición que limita su vida, generalmente se recomienda el aborto. Pero no mataron al pequeño Albi, nació, fue amado, vivió casi 2.5 horas y se le dio duelo.

Esto es precioso. #TodaVidaCuenta”.

El Caso de Albi:

Gary y Lauren esperaban gemelos. A uno de ellos lo nombraron Bobby, y al otro Albi.

Bobby estaba sano pero Albi no desarrolló su cráneo por completo y sabían que moriría poco después de nacer. Los médicos propusieron abortarlo pero sus padres se negaron.

“Lo he visto moverse, he visto su corazón latir. Tengo una conexión con él. Aparte de su condición con la cabeza, todos los órganos están perfectos. Así que estoy interesada en donar órganos para poder salvar la vida de otros bebés. De lo negativo puede salir algo positivo”, indicó Lauren en el video.

Sin embargo, los médicos debieron adelantar el parto para salvar a Bobby y Albi no logró el paso suficiente para que sus órganos pudieran donarse.

Nacieron a las 35 semanas de gestación. Albi vivió tan solo 2 horas y media. Durante todo ese tiempo estuvo con su padres, abrazado y acompañado hasta su último suspiro.

Lauren le repitió una y otra vez: “Eres nuestro bebé”.

12 días después, Gary y Lauren pudieron llevar a Bobby a casa.

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