El sacerdote y exorcista canadiense Françoise-Marie Dermine, advirtió que creer en supersticiones y la magia es en el fondo confiar más en el demonio que en la providencia de Dios.

“Cuando una persona recurre a la magia no tiene confianza en Dios, piensa que Él no puede darle lo que quiere, entonces acude a los brujos para lograrlo”, explicó.

“Lo que no saben -añadió- es que el brujo realiza ritos y emplea signos de los cuales el demonio se sirve para hacer su voluntad”.

También advirtió que al probar la “magia blanca”, podrías obtener “lo que quieres, pero hay un después, y el demonio te cobra lo que tú le pediste”.

Una superstición es también impuesta a un santo, sobre todo cuando se piensa que es él o ella quien te cuida y no Dios.

También recordó a los católicos que los brujos suelen engañar a los creyentes al utilizar imágenes de santos o de la Virgen para tranquilizar a las personas que llegan a solicitar sus servicios.

Finalmente, exhortó a los católicos a estar en guardia y no creer en amuletos, pues “si tuvieran fe, más confianza en Dios, todo esto no existiría.

Traten de tener cuidado con los engaños del enemigo de Dios. No existe una magia buena o blanca para remediar los males de la magia negra.

Todas son iguales y lo único que hacen es tener un encuentro con el demonio en diferente forma.

¡Tenlo en cuenta!

[Ver: Cuando Santo Tomás de Aquino usó unas “vacas voladoras” para corregir a unos burlones]

[Ver: ¿Qué peligros viven los que demoran en su conversión? San Alfonso María de Ligorio responde]

Comparte