El Padre Pedro Opeka es un sacerdote católico argentino, miembro de la Congregación de la Misión, que hace 30 años se mudó a Antananarivo, Madagascar.

Un día visitó el basurero de la ciudad y encontró a muchos niños peleando por la basura con perros y cerdos. El impacto fue tal que no pudo dormir en toda la noche.

Se levantó de su cama, se arrodilló y, mirando al cielo, rezó pidiendo a Dios que le permita ayudar a estos niños pobres.

Desde entonces su misión es rescatar a estos niños y moviliza a toda la comunidad para darles alimento, techo y estudios.

En este video puedes conocer su obra:


Fuente: Rome Reports

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