La Iglesia Católica es muy rica en símbolos y ritos que nos muestran misterios profundos de nuestra fe. Hoy compartiremos con ustedes uno de ellos: el Rito del Faro, que consiste en una enorme bola de fuego suspendida en medio de la Iglesia. ¡Conoce que nos quiere mostrar la Iglesia con esto!
La Misa que la mayoría de nosotros conocemos (Rito latino romano en la forma ordinaria) es una de las tantas formas de Misa que existen en nuestra Iglesia. Por ejemplo, también tenemos al rito romano extraordinario (Misa Tridentina), Hispánico, Cartujo, Dominicano, etc. Uno de ellos también es el Ambrosiano y es en este precioso rito donde ocurre el impresionante Rito del Faro.
El origen del Rito del Faro es bastante antiguo (hay evidencias del mismo en el siglo VII) y en la actualidad se conserva en las fiestas de un mártir.
Al iniciar la Misa el sacerdote entra en procesión y se detiene al llegar al presbiterio justo debajo de una bola de algodón, lana u otro material combustible que se encuentra suspendida del techo de la Iglesia. Luego toma una vara especial con 3 velas en la parte superior y con ella enciende la esfera que se consume rápidamente.
Este gesto es una alegoría al sacrificio del mártir quien dio su vida por Cristo.