La hermana Elaine Maria, de las Mercedarias de la Caridad, fue sorprendida recientemente con un regalo inesperado: una camiseta oficial del Vasco da Gama.

Lo que parecía solo un gesto de cariño terminó volviéndose viral en las redes sociales. La conmoción fue tal que el club la invitó a visitar su estadio São Januário y el centro de entrenamiento Moacyr Barbosa — un sueño de muchos años para la religiosa.

En una entrevista con ChurchPOP en Portugués, la Hermana Elaine compartió cómo se sintió al recibir tanto cariño por parte de los hinchas y al vivir un momento tan especial.

"¡Sentí una alegría del tamaño del Vasco: gigante!"

“¡Todo pasó muy rápido! Cuando recibí el mensaje de Mário, de VascoTV, y de Patrícia, del equipo de prensa, casi no lo podía creer. Llegar a Barreira, abrazar a las personas, compartir la alegría por el fútbol... ¡fue mágico!”, dijo emocionada.

La hermana también visitó el centro de entrenamiento del club, donde entregó rosarios y medallas de Nuestra Señora de las Mercedes a los jugadores. “¡Fue increíble!”, contó.

"¡Parece que estoy en la Vascolandia!"

Cuando le preguntaron cuál fue el momento más especial, respondió con entusiasmo:

“Tenía muchas ganas de conocer el estadio, también por su historia. ¡Pero cuando llegué a Barreira, pensé: gente! ¡Qué energía tan increíble! ¡Parece que estoy en la Vascolandia! Me emocioné mucho con la hinchada tan apasionada por el Vascão”.

Según ella, tanto en la visita a São Januário como al centro de entrenamiento, todos fueron extremadamente acogedores:

“Muchas veces me dijeron: ‘¡hermana, esta es su casa, usted es parte de nuestra familia!’”.

"Recibir tanto cariño me hizo pensar en Dios"

La Hermana Elaine afirmó que toda esta experiencia también fue un signo de Dios en su vida:

“Me sentí muy fortalecida en la fe. Muchas personas decían: ‘hermana, ¡la bendición! ¡Reza por mí!’. Recibir tanto cariño me hace pensar en Dios, porque la gratitud es tan grande que ni siquiera sé cómo agradecer. ¡Solo Dios puede comprenderlo!”
Hermana Elaine con la camiseta del Vasco en la Capilla de Nuestra Señora de las Victorias, en São Januário. Créditos: Matheus Lima.

Una visita, un testimonio

Más que una simple visita, el paso de la hermana por los bastidores del club fue un testimonio concreto de cómo la fe puede habitar todos los espacios — incluso el campo de juego.

Como hija espiritual de Nuestra Señora de las Mercedes, la Hermana Elaine lleva consigo la misión de consolar, liberar y evangelizar. Y ese día, entre sonrisas, abrazos y cánticos de la hinchada, se vistió con el manto vascaíno como quien lleva el manto de la misma Virgen María.

Que su ejemplo inspire más gestos de fe, esperanza y comunión entre el Cielo y los campos.

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