El New York Times informó esta semana que Netflix, la gigante empresa de películas y series por internet, estaría dispuesta a evaluar si continuar sus inversiones en el estado de Georgia, Estados Unidos, si este pone en vigencia la ley pro-vida “Heartbeat”, firmada el pasado 7 de mayo.

Esta ley prohíbe la práctica del aborto a bebés que se les pueda detectar el sonido del latir de su pequeño corazón, que normalmente sucede entre las 6 y 9 semanas de embarazo, inclusive antes. Esto no se aplicaría en los casos de violación o incesto.  

Así también se informó a su vez que hubieron muchas llamadas a las empresas cinematográficas de Hollywood para pedir boicotear las empresas del cine y televisión en Georgia. Negocios que generan 92 mil empleos y 2.7 millones de dólares anuales.

Palabras del vocero

“Tenemos muchas mujeres trabajando en producciones en Georgia, cuyos derechos, junto con otros millones, se verán gravemente restringidos por esta ley. Es por eso que trabajaremos con la ACLU y otros para luchar en la corte”, indicó el vocero de Netflix, Ted Sarandos.

También dijo: “Dado que la legislación aún no se ha implementado, continuaremos filmando allí, al mismo tiempo que apoyaremos a los socios y artistas que elijan no hacerlo. Si alguna vez entrara en vigor, consideraríamos toda nuestra inversión en Georgia”.

Habría mucho en juego

Hollywood ha trabajado películas importantes en el estado de Georgia, como por ejemplo “Juegos del Hambre”, “Capitán América: Guerra Civil” y “Pantera Negra”. Sin mencionar a las series de Netflix, “Stranger Things” y “Ozark”.

Warner Bros. y Disney no se han manifestado ante la pedida de boicot contra la industria en Georgia. Sin embargo hubieron celebridades que indicaron que no trabajarían en este estado si se pone en vigencia dicha ley. Otros, como el director J.J. Abrams, indicaron que se quedarían pero donaría dinero a los movimientos contra la ley “Heartbeat”.

Hasta ahora la ley es un proyecto firmado, se pondrá en vigencia en enero del 2020. Se tiene todos estos meses para decidir qué hacer. Aun así, los republicanos y los que están a favor de la ley han expresado no tener miedo al boicot hollywoodense.

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