Responder esta pregunta podría ser difícil para algunos, ya que muchos católicos tienen en claro que no adoramos a las estatuillas, sino que veneramos lo que estas representan.

Sin embargo, el Viernes Santo tenemos la Liturgia de la Muerte del Señor, donde hay una parte donde se llama, literalmente, Adoración a la Cruz ¿Esto realmente es así? ¿Adoramos a aquello con lo que se asesinó a Cristo?

El sacerdote José Antonio Marcone, escribió en la página Apologetica.org la respuesta teológica a esta pregunta: no estamos adorando a la Cruz, estamos adorando a Cristo mediante la cruz.

A esto se le llama culto de latría relativa, que es adorar o tener culto a algo mediante un objeto que tuvo un contacto profundo con aquello que adoramos. En este caso, nosotros adoramos a Cristo por el misterio de su muerte y nuestra redención, mediante su Cruz.

La Cruz es un símbolo, peor también estuvo profundamente conectada a la inmolación de Cristo. Estuvo en contacto con Aquel por quien tuvimos la salvación con su muerte.

Entonces, si alguien te pregunta por la razón por la que los católicos “adoramos a un pedazo de madera”, la respuesta es que nosotros no lo hacemos, sino que adoramos a lo que esta representa: Cristo, que murió por nuestros pecados para que volvamos al Padre.

Comparte