El 28 de septiembre, un grupo de al menos 100 feministas atacaron e inciendiaron una iglesia mientras los fieles asistían a Misa.
El hecho ocurrió en la parroquia San Ignacio de Loyola en Medellín, Colombia. Según informan medios locales, La Misa había comenzado a las 6:00 p.m. y el ataque se desencadenó cerca de las 6:30 p.m. (hora local).
Feministas incendian iglesia mientras los fieles se encontraban en Misa
El padre Guillermo Zuluaga explicó que se encontraba repartiendo la Comunión cuando un grupo de feministas arribó a una plaza gritando consignas abortistas.
Más de 30 minutos encerrados en la Iglesia de San Ignacio en Medellín; manifestantes causaron daños a la instalación y con un comando de Policía a 2 cuadras, nunca llegó pic.twitter.com/Q50wbTdhO7
— Ana Esneida Quintero (@anaquinterov) September 29, 2021
Por prevención, algunos feligreses decidieron cerrar las puertas para evitar el ingreso de las manifestantes. Cerca de 50 personas quedaron en el interior y puedieron escuchar cómo la agresividad de las feministas se recrudecía mientras atacaban la parroquia, escribiendo graffitis sobre la puerta y las paredes.
Sin embargo, la mayor violencia se vivió cuando intentaron irrumpir y asaltar violentamente el lugar, arrancando las rejas y prendiendo fuego a una de las puertas de madera.
“Había mucho pánico, porque como comenzaron a quemar las puertas, la gente pensó que la iban a quemar”, comenta el sacerdote.
Vándalos profanan la Iglesia de San Ignacio en Medellín. ¿Razón? porque son abortistas, porque son contra el sistema, porque son comunistas. @Cruzada_co
Y por eso, odian a Dios. 👇🏻👇🏻👇🏻 pic.twitter.com/nChilOyfqw— Hernan Villamil 🇨🇴 (@hevicam) September 29, 2021
Tratando de evitar una tragedia, algunos de los feligreses vaciaron varios extintores por debajo y la parte interna del portón, evitando que las llamas ganaran terreno.
Tras una hora del ataque de las feministas al templo católico, seis mujeres que se identificaron como garantes de Derechos Humanos, se interpusieron entre quienes protagonizaban las protestas y la puerta, buscando desescalar la tensión.
“Uno tiene derecho a manifestar sus opiniones y sus puntos de vista, pero siempre desde el respeto y la tolerancia”, expresó el párroco. “Esto no era una manifestación a favor de una idea, era una expresión de violencia”, concluyó.
¿Tú qué piensas?
¡Oremos porque cese esta violencia hacia la Iglesia!
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[Ver: Activistas proaborto invaden la misa, agreden a cura, y profanan estatua de San Juan Pablo II]