En estos más de diez años de Pontificado, el Papa Francisco ha dado numerosos consejos para ayudar a los católicos a vivir la fe. Debido a su estilo coloquial, cercano y su buen humor abundan en redes memes con frases muy populares que ha dicho o escrito… pero también hay numerosas publicaciones que atribuyen a su autoría mensajes que nunca ha pronunciado.
Los hechos: Al comenzar la Cuaresma 2024, se volvió a viralizar en redes sociales -en distintos idiomas- un mensaje que dice que el Papa ha propuesto cambiar el tradicional ayuno establecido por la Iglesia a los católicos por otros “ayunos”.
Conocidos influencers y hasta algunos perfiles católicos divulgan listas de alternativas para reemplazar el ayuno cuaresmal atribuyéndola al Papa Francisco:
Ayuna de palabras hirientes y pronuncia palabras amables.
Ayuna de tristeza y llénate de gratitud.
Ayuda de cólera y llénate de paciencia.
Ayuna de pesimismo y llénate de esperanza.
Ayuna de preocupaciones y ten confianza en Dios.
Ayuna de quejas, contempla la simplicidad.
Ayuna de presiones y vive en oración.
Ayuna de amarguras, llena tu corazón con alegría.
Ayuna de egoísmos y sé compasivo.
Ayuna de rencores y sé reconciliado.
Ayuda de palabras, sé silente y escucha.
Lo que sabemos: Quienes comparten estos consejos los asocian con el mensaje del Papa Francisco por la Cuaresma de 2015. Sin embargo, el texto original no los incluye.
ACI Prensa, en un artículo actualizado el 2024, indica que una versión inicial de la lista de “ayunos” se puede encontrar en el sitio web Catoliscopio con fecha marzo de 2009, es decir, que el texto circuló en Internet por lo menos cuatro años antes de que el Papa Francisco fuera elegido pontífice:
Ayuna de juzgar a otros; llénate del Cristo que vive en ellos.
Ayuna de palabras hirientes; llénate de frases que purifican.
Ayuna de descontento; llénate de gratitud.
Ayuna de enojos; llénate de paciencia.
Ayuna de pesimismo; llénate de optimismo.
Ayuna de preocupaciones; llénate de confianza en Dios.
Ayuna de quejarte; llénate de apreciar lo que te rodea.
Ayuna de las presiones que no cesan; llénate de una oración que no cesa.
Ayuna de amargura; llénate de perdón.
Ayuna de la importancia de tu mismo; llénate de compasión por los demás.
Ayuna de ansiedad personal; llénate de esperanza eterna en Cristo crucificado.
Ayuna de desaliento; llénate de esperanza.
El veredicto: El Papa Francisco no ha reemplazado el ayuno cuaresmal y tampoco es el autor de estos textos.
El Código de Derecho Canónico de la Iglesia Católica indica que:
“Todos los viernes, a no ser que coincidan con una solemnidad, debe guardarse la abstinencia de carne, o de otro alimento que haya determinado la Conferencia Episcopal; ayuno y abstinencia se guardarán el miércoles de Ceniza y el Viernes Santo.”
No te dejes engañar por los mensajes que encuentras en redes sociales. El ayuno y la abstinencia son medios penitenciales que nos ayudan a prepararnos para vivir los misterios de la pasión, muerte y resurrección.