Aunque a veces Hollywood pueda parecer el lugar menos propicio para fomentar la fe católica, la influencia del catolicismo en la industria cinematográfica estadounidense y en el mundo es innegable.
Hace unas semanas se anunciaron las nominaciones para los Premios de la Academia de este año, y no fue una sorpresa que la controvertida película “Cónclave” estuviera entre las nominadas a “Mejor Película”.
La película, protagonizada por Ralph Fiennes como un cardenal que lidera un cónclave papal en el Vaticano, obtuvo ocho nominaciones al Oscar. “Cónclave” no es la primera película sobre la fe católica en competir en la prestigiosa ceremonia de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas. Aunque ha generado debate por su polémico desenlace, muchas otras superproducciones de Hollywood que retratan el catolicismo también han llegado a los Oscar.
La película de 1943 “La canción de Bernadette", basada en la novela homónima de Franz Werfel, narra la historia de la vidente Bernadette Soubirous en Lourdes. El filme, que retrata las apariciones marianas en Francia a mediados del siglo XIX, ganó cuatro de las once nominaciones al Oscar. La actriz Jennifer Jones, quien interpretó a Bernadette, obtuvo el premio a “Mejor Actriz” y, como resultado, alcanzó la fama.
Al año siguiente, la comedia musical "Going My Way" tuvo como protagonista a Bing Crosby en el papel principal del padre Charles "Chuck" O'Malley, un sacerdote católico. El padre Chuck es enviado a hacerse cargo de una parroquia en Manhattan, donde enfrenta resistencia. La película fue la más taquillera de 1944 y recibió 10 nominaciones a los premios de la Academia, de las cuales ganó siete, incluyendo "Mejor Película".
Aunque la década de 1940 estuvo marcada por una gran influencia católica en Hollywood, las nominaciones para películas de temática religiosa apenas comenzaban. Por tercer año consecutivo, un filme que representaba la fe católica fue nominado a los Oscar. En esta ocasión, se trató de una secuela. “Las campanas de Santa María" presentó nuevamente a Bing Crosby en el papel del padre Chuck O'Malley.
Esta vez, la icónica Ingrid Bergman, famosa por su papel en “Casablanca” (1942), coprotagonizó la película junto a Crosby, interpretando a la hermana Mary Benedict, una monja católica y directora de una escuela en un barrio urbano. La película recibió ocho nominaciones en la 18va edición de los premios de la Academia y ganó un Oscar.
La Edad de Oro de Hollywood continuó representando el catolicismo, dejando una huella profunda y convirtiendo en estrellas a los actores que participaron en estas películas.
En la década de 1950, Hollywood vio el estreno de filmes como “El manto sagrado” (1953), “Los diez mandamientos” (1956) y “Ben-Hur” (1959), que catapultaron a la fama a Charlton Heston y Richard Burton. La década de 1960 tuvo un impacto igualmente significativo con películas como “La novicia rebelde” y “La agonía y el éxtasis” (ambas de 1965), así como “El hombre de dos reinos” (1966).
Sin embargo, más allá de la Edad de Oro de Hollywood, aún se puede observar la influencia del catolicismo en la industria cinematográfica estadounidense al analizar las nominaciones al Oscar a lo largo de los años hasta la actualidad.
Retrocediendo a 1973, un filme poco convencional fue nominado a 10 premios de la Academia, de los cuales ganó dos. No solo estaba basado en una novela escrita por un devoto católico, sino que además pertenecía al género de terror, un ámbito en el que pocas películas han logrado llegar a los Oscar.
Ese filme fue “El Exorcista”. William Peter Blatty, autor de la novela homónima publicada en 1971, adaptó su obra al guión cinematográfico. La película obtuvo el premio de la Academia a "Mejor Guión Adaptado".
Se dice que las escenas de posesión y exorcismo en la película eran tan realistas que el público quedó impactado, y un espectador simplemente exclamó: “Creo, creo” al salir del cine. Aunque tanto la película como la novela estaban basadas en un caso real de exorcismo ocurrido a un niño en St. Louis, Missouri (Estados Unidos), Nuestra Señora de Fátima y San Miguel Arcángel, quienes desempeñaron un papel importante en el exorcismo real, fueron omitidos en la película.
En la década de 1980, películas como “La Misión" (1986) contribuyeron al crecimiento de las carreras de jóvenes actores como Liam Neeson, Jeremy Irons y Robert De Niro. Este drama histórico narra la historia de sacerdotes misioneros jesuitas en la selva de América del Sur. La película fue nominada a siete premios de la Academia y ganó uno.
Este filme guarda paralelismos con “Silencio” (2016), el proyecto más personal del cineasta católico Martin Scorsese, que también relata la historia de sacerdotes misioneros jesuitas, pero esta vez en Japón. “Silencio” también recibió una nominación en la 89va edición de los premios de la Academia.
Al analizar el cine del siglo XXI, nadie puede negar el impacto que tuvieron en todos nosotros las crudas, brutales y honestas escenas de “La Pasión de Cristo" (2004). Ni siquiera Hollywood pudo ignorarlo, ya que la película recibió tres nominaciones en la 77va edición de los premios de la Academia en las categorías de cinematografía, maquillaje y banda sonora original.
Incluso la aclamada “Los asesinos de la luna" (2023), otra película de Martin Scorsese, abordó el catolicismo en el centro de su trama y conflictos. Este drama criminal se enfoca en una serie de asesinatos de miembros de la tribu Osage tras el descubrimiento de petróleo en su territorio. La protagonista, Mollie Kyle, cuya familia posee derechos sobre el petróleo y es de origen Osage, es una devota católica.
Los personajes de la película asisten regularmente a Misa y, en su mayoría, son católicos, ya que la nación Osage adoptó el catolicismo como una estrategia para afirmar su soberanía y defender su autogobierno. La película aborda la lucha entre el bien y el mal, un tema con el que muchos católicos pueden identificarse en su vida diaria. Aunque “Los asesinos de la luna" recibió 10 nominaciones en la última edición de los premios Oscar, se fue a casa sin ninguna estatuilla.
Con la ceremonia de los Oscar 2025 acercándose rápidamente, habrá que esperar para ver si la Academia considera que la controvertida película “Cónclave”, de temática "católica", es merecedora de algún premio. Por ahora, sin embargo, existen muchas otras producciones cinematográficas que representan con mayor fidelidad la belleza de la fe católica.
Es importante señalar que, para los creyentes, existe una gran diferencia entre películas como “La canción de Bernadette” y “La Pasión de Cristo”, que son católicas en su esencia, y películas como “Cónclave” o incluso “Spotlight” (2015), que tratan sobre el catolicismo pero no son películas católicas en sí mismas.
Mientras que el arte puede ser subjetivo, el catolicismo simplemente no lo es.