Cada vez que se escoge un nuevo Papa, los cardenales reunidos en Cónclave elevan una súplica solemne al cielo: “Veni, Creator Spiritus”. Este himno es una invocación al Espíritu Santo, para que guíe con sabiduría y unidad una de las decisiones más trascendentales para la Iglesia.

Este 7 de mayo, los cardenales electores se congregaron en el Vaticano para dar inicio al Cónclave, el momento en que el Colegio Cardenalicio se encierra en oración y deliberación para elegir al nuevo Sucesor de Pedro.

Los cardenales ingresaron en procesión a la Capilla Sixtina, mientras entonaban la Letanía de los Santos. Una vez en sus lugares, los cardenales invocaron al Espíritu Santo con el canto del Veni, Creator Spiritus.

Este himno, compuesto en latín en el siglo IX y atribuido a Rabano Mauro —abad de Fulda y arzobispo de Maguncia, Alemania—, ha acompañado a la Iglesia en momentos decisivos a lo largo de los siglos.

“‘El más famoso de los himnos’ (Frere), se asigna en el Breviario Romano a las Vísperas (I y II) y a Tercia de Pentecostés y en toda su octava. La Iglesia también lo canta en funciones solemnes tales como la elección de Papas, la consagración de obispos, la ordenación de sacerdotes, la dedicación de iglesias, la celebración de sínodos o concilios, la coronación de reyes, etc. También se canta en ceremonias más privadas que acompañan la apertura y el cierre del año académico en instituciones de enseñanza”, agrega la Enciclopedia Católica.

El canto implora al Espíritu Santo que derrame sus dones: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios, y guié los corazones de los cardenales en la elección papal.

Veni Creator Spiritus (latín)

Veni, Creator Spiritus,
mentes tuorum visita,
imple superna gratia
quae tu creasti pectora.

Qui diceris Paraclitus,
Donum Dei Altissimi,
Fons vivus, ignis, charitas,
Et spiritalis unctio.

Tu septiformis munere,
Dextrae Dei tu digitus,
Tu rite promissum Patris,
Sermone ditans guttura.

Accende lumen sensibus,
Infunde amorem cordibus,
Infirma nostri corporis,
Virtute firmans perpeti.

Hostem repellas longius,
Pacemque dones protinus;
Ductore sic te praevio,
Vitemus omne noxium.

Per te sciamus da Patrem
Noscamus atque Filium;
Teque utriusque Spiritum
Credamus omni tempore.
Amen.

Veni Creator Spiritus (español)

Ven, Espíritu Creador,
visita las almas de tus fieles
llena con tu divina gracia,
los corazones que creaste.

Tú, a quien llamamos Paráclito,
don de Dios Altísimo,
fuente viva, fuego,
caridad y espiritual unción.

Tú derramas sobre nosotros los siete dones;
Tú, dedo de la diestra del Padre;
Tú, fiel promesa del Padre;
que inspiras nuestras palabras.

Ilumina nuestros sentidos;
infunde tu amor en nuestros corazones;
y, con tu perpetuo auxilio,
fortalece la debilidad de nuestro cuerpo.

Aleja de nosotros al enemigo,
danos pronto la paz,
sé nuestro director y nuestro guía,
para que evitemos todo mal.

Por ti conozcamos al Padre,
al Hijo revélanos también;
Creamos en ti, su Espíritu,
por los siglos de los siglos.
Amén.

Comparte