David Hernández-García, un anciano católico de 82 años, fue ingresado en el Hospital Antelope Valley de Lancaster, California (EE. UU.), enfermo de Covid-19, cuando sucedió algo brutal. Fue golpeado hasta la muerte. ¿El motivo? ¡Porque estaba rezando!
El criminal, Jesse Martínez, también tenía con Covid-19 y compartía habitación con David. Según la policía de Los Ángeles, estaba “molesto cuando la víctima comenzó a rezar. Luego golpeó a la víctima con un cilindro de oxígeno” .
El lamentable hecho ocurrió el 17 de diciembre de 2020, y al día siguiente, el anciano “sucumbió a sus heridas y fue declarado muerto el 18 de diciembre de 2020, alrededor de las 10:20 am. La víctima y el sospechoso no se conocían”, dijo la policía.
El hombre fue detenido por el personal del hospital hasta que llegó la policía y luego fue arrestado. Será responsable de asesinato, abuso de ancianos y crímenes de odio a causa de la religión. Si es declarado culpable, enfrentará hasta 28 años de prisión.
Preguntado sobre el caso, el Hospital de Antelope Valley informó que el centro estaba trabajando solo con atención de emergencia, debido a la falta de profesionales en ese momento y con “el equipo médico que sufría de agotamiento”.
¡Oremos por su alma!
Este artículo fue traducido de ChurchPOP Portugués.
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