¿Qué podemos hacer cómo católicos en Halloween? La creadora de contenido digital, María Paula Aldana, dio 4 consejos que nos pueden ayudar en este día de batalla espiritual.
En su cuenta de Instagram “Somos Suyos”, Aldana señaló que para los cristianos, la víspera del día de todos los santos o Halloween no es una celebración de la muerte, sino un llamado a reflexionar sobre ella.
“Nosotros reflexionamos sobre el sentido mismo de la muerte, aquellos que en Dios la vencieron y oramos por aquellos que aún se purifican después de ella. Meditamos en nuestra propia muerte y nuestro destino eterno, porque en la forma como vivimos elegimos cómo y para qué morimos”.
Sin embargo, Aldana señaló que actualmente Halloween se ha llenado de connotaciones espirituales oscuras donde “se cometen toda clase de profanaciones y sacrilegios y se incrementa la actividad esotérica”.
¿Entonces cuál es nuestro papel cómo católicos? La creadora de contenido dio 4 consejos para entender nuestra labor en esta batalla espiritual.
1) Despierta
"Es ignorancia, tibieza o ingenuidad pensar que esta fiesta no tiene un trasfondo espiritual. Si sus connotaciones son espirituales sus efectos también lo serán, y cristianos tibios y acomodados al mundo que no le ven nada de malo a nada difícilmente pueden llamarse cristianos".
2) Instrúyete
"A veces aunque con muy buena intención terminamos disfrazando de moral, dogma o mandamiento cosas sin sentido y sin fundamento. Instrúyete sobre las raíces de esta celebración y forma tu propio juicio".
3) No ataques a los demás
"Tu radicalidad no es justificación para atacar. Recuerda que la coherencia de vida cristiana es sobre todo una decisión personal. Podemos aconsejar y corregir fraternalmente a otros, claro que sí, pero volverte un disco eterno de cantaleta sobre porque todos los demás se condenarán en Halloween menos tú no convencerá a nadie.
Vive tu fe y ora por aquellos que tienes a tu alrededor, tu actitud en situaciones así será un gran testimonio o un antitestimonio".
4) Mira lo que estás llamado a hacer
"Halloween para un Cristiano no se trata de lo que no puede hacer, sino de lo que está llamado a hacer.
No está enfocado en el pecado sino a dónde hemos sido llamados a repararlo. Mientras el mundo celebra la muerte, nosotros velamos a los pies del que es la vida. Mientras en el mundo se le profana, nosotros lo adoramos en la Eucaristía. Mientras los demás desconocen que hay una lucha espiritual, nosotros batallamos con las armas espirituales y en comunidad.
Halloween para el Cristiano es una noche entre tantas para amar al que no es amado, de nada sirve que no lo celebres o te quedes en casa si esta noche no estás orando ni reparando".
Te dejamos una oración de reparación para realizar esta noche frente al Santísimo Sacramento.
Acto de desagravio ante el Santísimo Sacramento
Señor Jesús, nos arrodillamos ante ti, reconociendo tu presencia real en el Santísimo Sacramento. Te agradecemos inmensamente tu permanencia con nosotros, y la fe que nos has dado.
Con profundo dolor sentimos que tantos hombres, redimidos por ti, te olviden y ofendan; que en tantos sagrarios estés solitario y en tantos hogares no seas invitado.
Nosotros, arrepentidos de nuestros pecados, queremos en la medida de nuestras fuerzas hacerte compañía por cuantos te abandonan, y dedicarte completamente nuestra vida, como ofrenda y desagravio a tu Corazón pleno de amor hacia nosotros.
Santa María, Madre nuestra, confiamos en tu Inmaculado Corazón que nos alcances gracias para perseverar en la fe, animarnos por la esperanza y vivir la caridad, como satisfacción por todos nuestros pecados y para la salvación del mundo.
Por todas las blasfemias, sacrilegios, profanación de fiestas, que se cometen contra el nombre de Dios y contra sus templos.
Perdón, Señor, perdón.
Por todos los ataques a la Iglesia, persecuciones y propagandas de ateísmo.
Perdón, Señor, perdón.
Por los apóstatas, los que desprecian el Magisterio de los Papas y todos los falsos profetas.
Perdón, Señor, perdón.
Por todas las opresiones de gobierno, de esclavitud, de delincuencia; y todas las injusticias laborales, familiares, sociales.
Perdón, Señor, perdón.
Por todos los actos inhumanos de violencia, asesinatos, torturas, malos tratos; robos, estafas, extorsiones.
Perdón, Señor, perdón.
Por toda la inmoralidad y corrupción: en el trabajo profesional, en las relaciones, espectáculos, diversiones, modas, lecturas, bebidas, drogas.
Perdón, Señor, perdón.
Por todos los pecados de escándalo y de respeto humano.
Perdón, Señor, perdón.
Por todos los pecados contra la santidad de la familia y contra el amor fraterno.
Perdón, Señor, perdón.
Por los sacerdotes indignos, por los políticos ambiciosos, por todos los abusos de autoridad.
Perdón, Señor, perdón.
Oración:
Cristo Jesús, pedimos en especial a tu Corazón que concedas gracias abundantes a los más necesitados; y que nunca permitas nos apartemos de Ti; sino que aprendiendo en tu Corazón nuestros sentimientos y juicios cada día nos parezcamos más a Ti. Amén.