¡La Gruta de la leche es un lugar de peregrinación para parejas que tienen la intención de resolver sus problemas de fertilidad desde el siglo IV!
Un ángel se apareció en un sueño a San José y le anunció que junto con María y el Niño Jesús tendrían que huir a Egipto debido a la persecución que el Rey Herodes estaba a punto de llevar a cabo (Mt. 2, 13-5)
El milagro de la leche
Los primeros cristianos creían que la Sagrada Familia, poco después del nacimiento de Jesús en Nazaret, se trasladó por un corto período de tiempo a esta cueva en Belén para esconderse de los soldados de Herodes.
Una antigua tradición cristiana dice que la Gruta, que antes era roja, se volvió completamente blanca cuando una pequeña gota de leche materna de María, amamantando a Jesús, cayó sobre una roca en la cueva.
La cueva se llamaba Gruta de la Leche y rápidamente se convirtió en un lugar de peregrinación para los primeros cristianos, que creían que mezclar la tiza blanca y suave de la cueva con comida y bebida mejoraría su fertilidad y la producción de leche materna.
Un lugar de peregrinación
Hacia finales del siglo IV, la Gruta de la Leche se convirtió en una pequeña capilla.
En 1872, la capilla actual de la Gruta de la Leche se construyó en el sitio de la capilla original que data del siglo IV. La capilla se encuentra en Belén, en Cisjordania, a pocos kilómetros de la Iglesia de la Natividad.
Los peregrinos que visitan la Gruta de la Leche pueden recibir una pequeña bolsa que contiene leche en polvo de los frailes que mantienen el sitio. Las parejas que desean beneficiarse de ella siguen una devoción especial de 40 días en la que deben beber una pequeña cantidad de leche en polvo todos los días y recitar una oración diaria por la fertilidad.
Incluso hoy, la Gruta de la Leche de Belén es visitada por parejas, cristianas y musulmanas, que piden la intercesión de la Virgen para tener hijos y criarlos de manera saludable.
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