No es novedad saber que, en alguna celebración importante de la farándula internacional, las noticias le prestan mucha atención a los diseños de la ropa que los famosos usan.

Sin embargo, existen ciertos modelos de vestimenta que, si no se tuvo alguna intención sacrílega, puede despertar polémica por rayar con la falta de respeto.

Aquí te compartimos algunos ejemplos de esto:

Madonna:

En la Metropolitan Museum of Art’s Costume Institute Gala de Nueva York, más conocido como los Met Gala, celebrados en el 2018, se decidió tener como temática el catolicismo. Madonna decidió venir vestida con estilo gótico, con una cruz en el torso y una corona hecha de crucifijos.

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Rihanna:

También durante los Met Gala del 2018, la famosa cantante decidió venir vestida como obispo. Usando una gran túnica y una muy explícita mitra. Todo bordado de plata y joyas.

Sarah Jessica Parker:

En el mismo evento, la famosa protagonista de la serie Sex and the City, se presentó con un vestido dorado. Lo que más llamaba la atención era el sombrero que portaba. Este era un Nacimiento, o Belén, donde estaban San José, Santa María y el niño Jesús.

Fuente: People
Fuente: People

Lana del Rey:

La cantante asistió a la gala con un vestido que, de por s,í no presentaba nada religioso a simple vista. Sin embargo, si se ponía más atención, en su pecho tenía un corazón con siete espadas clavadas. Este es un símbolo famoso mariano, perteneciente a la Virgen de los Dolores.

Fuente: Vogue
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Jared Leto:

El cantante, actor, director y compositor estadounidense asistió a la gala usando una estola con diseño florido, imitando lo que los sacerdotes católicos usan para confesar y otras liturgias.

Fuente: Access
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Stella Maxwell:

La modelo neozelandesa de Victoria Secret asistió usando un vestido utilizando explícitamente imágenes de la Virgen María.

Fuente: Virtue
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Dakota Johnson:

En el Met Gala de este año, a pesar de que el tema de la noche no tenía una connotación religiosa, la actriz optó por traer un vestido cuyo centro llevaba el corazón sangrante de Jesús.

Fuente: Glamour
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